C A P Í T U L O 29

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 V Y N E E A

—¿Qué quiere decir con eso? —Los ojos de la mujer quedaron fijos en los míos de nuevo y un escalofrío me recorrió la espalda.

Era tan extraño observar aquellos ojos que parecían tan martirizados pero a su vez tan vivos, tan ansiosos de...algo más.

—A que no saldrás de aquí hasta que mi esposo creas que eres algo que él puede domar —Su voz era fría, como si fuera capaz de ocultar todas y cada una de sus emociones —Sólo cuando hayas mentido lo suficiente como para hacerle creer que no puedes herirlo, solo entonces, podrás huir si es que te place.

El nudo de nervios e impotencia que me sostenía la respiración no hizo otra cosa que afianzarse aún más a mis entrañas.

—Ahora toma asiento —Ordenó Eris mientras deslizaba una silla de la mesa junto a la que estaba parado —Parece que Rhysand apenas se molestaba en alimentarte, si quieres convencer a mi padre necesitas ser capaz de caminar hasta la mansión.

Estuve apunto de responder con un insulto pero me obligue a tragarmelo mientras yo deslizaba una silla para mi misma, la madre de Eris tomó asiento en la que su hijo había deslizado para ella.

En cuestión de un instante Eris sacó varios platos ya preparados y los colocó sobre la mesa, al destaparlos de la tela, que había hecho que su contenido no se esparciera por toda la mochila donde habían sido trasladados, el aroma a tocino me bañó la nariz y mis ojos casi se abrieron con asombro al ver el pan aún ligeramente humeante.

No era una cena increíble, para nada parecida a la que estaba segura de que ofrecieran en la mansión donde la madre de Eris y él mismo solían comer, pero era más de lo que esperaba, era algo.

—Come muchacha, el pan frío en estas tierras no es lo mejor que peludas probar —Algo confundida por la advertencia de la mujer no esperé nada más, tome un trozo de tocino y pan y juntos los introduje en mi boca.

Una Corte De Sombras Y Sangre© [CASSIAN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora