CAPÍTULO 15

783 61 9
                                    

Capítulo 15

Judie Brooks

Esa noche Olivia y yo habíamos decidido ir a dormir a casa de mis padres, para que cuando despertara al día siguiente pudiera estar junto a ellos.

Pude dormir fácilmente posteriormente de que Cole me llamara después de la media noche para desearme feliz cumpleaños. Cuando desperté a la mañana siguiente no me sorprendí al encontrar a mi madre con un pequeño pastel de chocolate con una vela del número 18 en su mano, junto a mi padre que sostenía un globo con la frase "Feliz cumpleaños". Eso era una pequeña rutina de todos los años en los cumpleaños entre nosotros.

Desayunamos todos juntos los Panqueques de mi madre. También había recibido algunas llamadas de felicitación de parte de los chicos y algunos de mis familiares. Después, Olivia y yo salimos al centro comercial para hacer algunas compras y ella me terminó comprando un conjunto de ropa que me había gustado. Hacíamos eso todos los años. Al regresar a casa cuando ya era algo tarde, pude distinguir el olor a la comida de mi papá viniendo del patio trasero.

—Necesitas arreglarte. —pidió mi amiga cerrando la puerta de mi habitación detrás de ella con las bolsas de compras en las manos.

—¡Pero sí solo seremos nosotros cenando en el patio! No necesito arreglarme tanto. —reñí e hice una mueca.

—Claro que sí. Y vas a ponerte el bonito conjunto que te regalé. —dejó las bolsas encima de la cama y puso los brazos en jarras.

—¿Sí lo hago, me prometes no tirarme contra el pastel?

—Te lo prometo. —aseguró enseguida.

—Vale —murmuré con pesadez—, me arreglaré.

Mi mejor amiga empezó a dar pequeños aplausos con sus manos con felicidad. Ella estaba más alegre que yo en este día.

Saqué de una de las bolsas que estaba en la cama es conjunto que Olivia me regaló. Consistía de una camiseta azul con una falda negra. Ella me había convencido por escoger la falda en vez de un pantalón. No era fan de las faldas o vestidos. Solo los solía utilizar para salir a lugares especiales o fiestas, que tampoco era algo que hiciera mucho.

Ya vestida y maquillada totalmente, salí de mi habitación junto a Olivia, quien también ya se había arreglado, salimos al jardín trasero de la casa. Ya estaba casi oscuro —el sol ya se estaba escondiendo—. Mi madre se había encargado de decorar con unos pocos globos el lugar, aunque no entendía el por qué lo hacía si lo éramos nosotros. Mi padre estaba terminando de hacer la cena —qué olía muy bien, por cierto—.

Me encantaban este tipo de cenas de cumpleaños, todos los años los festejábamos así: solo nuestra familia (Olivia formaba parte de ella).

Olivia y yo fuimos directo a sentarnos en la mesa que habían colocado afuera y mi madre se nos unió.

—Te queda bien el azul. —dijo mi mamá.

—Lo sé, me lo has dicho muchas veces. —digo con una sonrisa.

—Pues me gusta recordártelo —nos miramos en silencio mientras sonreíamos. Ella fue la que volvió a hablar para romper el silencio—. Háblenme un poco sobre sus nuevos amigos.

—Pues... —pensé que decir— Ah, sí, Lisa puede dormir todo el día sí fuera por ella.

—Sí. Y Kate y Eliot son inseparables. —continuó mi amiga.

—Y a Cole ya lo conoces.

—Y hablan demasiado, de cualquier tontería, así que nunca te vas a aburrir de estar con ellos.

Reencontrados Para Siempre [BORRADOR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora