Parte de mi

CAPÍTULO 40

Ino tenía una postura de total firmeza, nada que ver con la casi encorvada y tímida chica que se había estado presentando ante él. incluso su rostro parecía estar aburrido mientras le apuntaba amenazadoramente con una pistola.

- Ino ¿Qué estás haciendo? Suelta esa arma.

- Toneri, tu realmente lo mataste ¿Verdad? Siempre creí que lo hizo la estúpida mojigata, pero no debería sorprenderme que lo hicieras tu.

Ino se mantuvo sin mover un milímetro su arma de donde se encontraba, pero por extraño que pareciera, no tenía miedo por su seguridad. Era como si su lado racional no estuviera activado y solo estuviera un lado acelerado que le decía que debía sacarla de ahí.

- No, fui yo, así que vayamos a platicar de esto a otro logar ¿te parece?

- No, no me parece, te di la oportunidad de hacerlo y tu solo me dejaste plantada en un maldito aeropuerto. Así que la oportunidad de hablar se acabó, de todos modos, no recuerdas nada, ya no me sirves. Así que el solo matarte seria quedar mano a mano.

- Okay, en ese caso hazlo y lárgate.

Ino ladeo su cabeza con curiosidad, como si no entendiera lo que dijera.

- De verdad no creí que fuera tan fácil esto, incluso quita algo de emoción el asunto.

- Bueno, no todos tenemos lo que queremos, así que solo hazlo.

Ino le miro con furia hasta que el sonido de unos tacones con prisa se escuchó y Naruto sintió que su sangre se enfriaba.

Y es que, del pasillo más alejado, vio venir a una furiosa Hinata sin quitar la mirada de su objetivo, y ese era Ino.

La rubia se dio cuenta y Naruto entonces vio miedo en su mirada antes de solo intentar ocultarlo y apuntarle directamente a su esposa.

- ¡No! ¡Esto es entre tú y yo!

Dijo con desesperación al ver que aquella arma se dirigía a Hinata, pero su esposa no parecía importarle, como si aquella arma no fuera solo más que un estorbo de su objetivo y no algo que podía quitarle la vida en un segundo.

- Detente.

Le dijo Ino, pero Hinata parecía no escuchara hasta que Ino volvió a dirigir su arma a Naruto, fue cuando capto que no estaban solas y ella se detuvo, pero su mirada de odio fue dirigida a Ino.

- Tu perra, sabía que debí matarte ese día que Naruto estaba en tu casa. No debí ser compasiva contigo y solo amenazarte.

Soltó Hinata con una voz cargada de furia, sorprendiendo a Naruto.

- Debiste, pero ahora no hay marcha atrás, por fin están en mi mano. Por fin podre vengarme de lo que me arrebataste.

- ¡Arrebatar! -Se burlo Hinata- ¡Como si alguna vez quise tener a ese maldito! ¡Tú y el podían irse al infierno juntos si por mi fuera!

- ¡Cállate! ¡Todo esto es tu culpa! ¡Tenías que poner tus ojos en Naruto! ¡tenías que destruir mi vida para tenerlo a él! ¡Solo debías esperar estúpida! ¡Solo eso!

Hinata avanzo con odio, pero Ino sostuvo con más firmeza el arma hacia Naruto dando su amenaza y deteniéndola.

- Ino, esto es entre tú y yo, déjala ir.

Volvió a pedir Naruto acercándose.

- ¡Y una mierda es contigo imbécil! ¡Tu estúpido niño mojigato! ¡De haber sabido que eras un maldito monstruo de adolescente te hubiera matado mejor!

- ¡Por eso lo aparte de ti! -Grito Hinata. - y tu tenías que volver ¿Qué esperabas? ¿Qué te dejara destruirme más?

- ¡Pero si tu fuiste la primera en destruirme!

- ¿Yo? - dijo Hinata con los dientes apretados. -Tu perra egoísta, usaste a Naruto como a un sirviente y planeabas dejarlo nada más te dejara de ser útil, solo lo aparte de ti, pero después resulta que no, que lo amabas después de todo tu maldito drama.

Ino volvió a apuntar su arma a Hinata, pero Naruto avanzo e Ino vio que se estaba viendo acorralada.

- Si no se quedan quieto matare a alguno al azar, así que ¡Quédense en su maldito lugar!

Ambos lo hicieron, pero la furia de Hinata parecía querer ignorar su seguridad porque dio un paso más.

- Estabas fuera de nuestras vidas hasta que mandaste a ese desgraciado ¿no podías dejarme ir porque te quite tu juguete?

- Eres una mentirosa, sabes que Toneri solo estaba haciendo justicia por mí, e inventaste todo de su interés por ti para que ese monstruo lo matara.

Naruto estaba maldiciendo por lo bajo por no tener su celular para no pedir ayuda a alguien. Debía sacar a Hinata rápido de ahí y ver como librarse de Ino, pero el solo ver como un arma estaba amenazando a su esposa en la misma habitación solo lo hacían volverse loco de miedo.

- ¿Quién dice que Naruto lo mato?

- ¿Qué? No es más que obvio.

Hinata sonrió y le miro con burla, haciendo enfurecer más a Ino. Pero en eso Sasuke y Kakashi salieron por el pasillo contrario, pero Ino los miro por el reflejo de unos de los cristales.

- Solo se multiplican. -maldijo Ino apuntándoles y haciéndolos retroceder. - Un paso más y le dispare a alguno.

- Ino, deja ya la maldita arma y entrégate por las buenas, no tienes idea en la posición en la que estas.

- Creo que si estúpido emo, con un arma y amenazando la vida de tu querido amigo y tu estúpida Hinata.

Kakashi se pudo frente a Sasuke e intento avanzar, pero el arma se dirigió a Hinata haciéndolo detenerse.

- Si le disparas a alguno ten por seguro que te hundiré en la cárcel hasta el final de tus días. No tienes escapatoria, mejor deja el arma.

- No me interesa, ya no tengo nada que perder. Lo único que quiero ahora es una venganza que me deben. Me quitaron a Toneri. Ese monstruo lo mato.

Apunto a Naruto, pero Hinata llamo su atención.

- No. No fue el, eres tan estúpida que supusiste que lo mato, cuando la realidad es que quien lo hizo fui yo. Después de todo, su vida era mía para hacer lo que quisiera. El mismo se condenó al fijar sus ojos en mí.

- ¡Eres una perra! Él nunca te miro con esos ojos ¡él era mío! Solo jugo contigo y lo sabes ¡Te merecías que te destruyera después de lo que me hiciste!

- ¿¡Y que te hice exactamente Ino? ¿¡Que!? Mandaste aun maldito psicópata por mi ¿¡y después me vengue y que hiciste estúpida!?

Arrojo un frasco a los pies de Ino.

- ¡Me arrebataste a Naruto cinco años! Pero esto no se va a quedar así tenlo por seguro. No solo te vas a enfrentar a mi furia, si no a la de los demás, no solo no sabrás donde deje el cadáver de ese desgraciado, si no que serás testigo de su tortura, de lo mucho que disfrute terminando con él, ¡y tú nunca pediste ni podrás hacer nada!

Ino por fin exploto y disparo. Todos se quedaron quietos mientras la bala impacta en alguien.

Kakashi derribo a Ino arrebatando su arma y derribando su cuerpo para someterle

Naruto sintió un dolor horrible en su cabeza y pecho, el aire salió de sus pulmones mientras miles de imágenes regresaban a su cabeza, el shock había activado una adrenalina que lo hizo detonar aquellos recuerdos que le fueron negados esos meses.

Pero a pesar de la sangre que salía de su nariz el solo pudo ignorar su dolor para correr a donde su esposa yacía en el suelo inconsciente sobre un charco escarlata.