Parte de mi

CAPÍTULO 42

Incluso Sasuke después de todos esos años jamás se había podido acostumbrar a esa forma de manejar de su amigo. Sentía que vomitaría si no se detenía, pero aun así sabía que pasara lo que pasara estarían bien porque era Naruto quien conducía.

Para su fortuna, el hospital se divisó en ese momento y con un suave y aun con la velocidad que venían, un sorprendente freno, quedaron a la entrada del hospital donde un grupo de médicos los esperaba.

Naruto salió con prisa del auto para sacar a Hinata y depositarla en una camilla.

—El disparo fue del lado izquierdo en la zona temporal, no sé qué tan profundo dio la bala, pero ha perdido sangre y no ha recuperado la conciencia desde entonces, sus pulsaciones han bajado.

Recito Naruto mientras caminaba a lado de su esposa y sin apartar la mirada de ella.

—Entiendo ¿hace cuanto fue esto?

—Aproximadamente veinte minutos.

—Bien, gracias por la información, a partir de aquí nos encargamos nosotros.

Pero la mano de Naruto frenó la camilla, deteniendo a todos y mirando como aquel brazo se aferraba con fuerza.

—Cualquier cosa. -Naruto por fin elevo sus ojos evaluando al personal médico, y haciendo que las enfermeras quisieran retroceder por su escrutinio. - pidan y hagan cualquier cosa porque ella sobreviva y si no se sienten capaces díganlo ahora para conseguir a gente que sí lo haga.

—Señor, somos perfectamente capaces...

Naruto se acercó al doctor y este se calló cuando solo sintió una sensación de miedo y el impulso de correr de ese hombre.

—Lo serán si quieren vivir.

El doctor solo le miro y asintió antes de que Naruto mirase a Hinata y soltara la camilla como si la vida le costará hacerlo y viendo como la apartaban de su lado, pero cuando las puertas se cerraron decidió que iría, pero unos brazos lo detuvieron.

—Déjalos hacer su trabajo, si estás ahí solo estorbaras.

Le advirtió Sasuke y Naruto siguió viendo las puertas en donde su esposa había desaparecido. Sasuke temió que lo ignorara, pero en eso Sakura se puso al frente con los ojos llenos de lágrimas.

—Hina...Hina querrá que te comportes porque cuando se recupere...voy a decirle que no te has portado bien.

Advirtió con la voz llorosa y apenas conteniendo sus ganas de soltarse en llanto. Naruto la miro y suspiro.

—Está bien. Ven aquí.

Sakura por fin se soltó a llorar cuando Naruto le acercó en un abrazo para que se calamara.

—Te extrañamos mucho, no sabes cuánto... ¿Por qué tenía que pasar esto?

Le decía Sakura mientras Naruto la llevaba a la sala de espera y Sasuke empezaba a hacer llamadas.

—Tranquila, Hina estará bien, todo lo estará, cuando menos lo pienses vamos a estar en la playa de vacaciones.

Sakura asintió limpiando sus lágrimas y sentándose mientras Naruto se ponía de cuclillas frente a ella.

—¿Nos lo prometes?
—Se los prometo, porque si yo logre regresar de la muerte, para mi mujer esto es un juego de niños.

Sakura asintió mientras Sasuke se acercaba extendiendo un pañuelo para Sakura.

—Cerezo, llame a los demás y las chicas no tardan en llegar. Por cierto, toma. -Le extendió una especie de toalla desinfectante a Naruto. – límpiate el rostro, te ves como psicópata con esa sangre en tu rostro...bueno, lo eres, pero guarda las apariencias.