15

943 54 2
                                    

Inosuke llegó con una gran sonrisa a su casa llamando la atención de sus padres, hermanos y cuñada.

Gyutaro:¿Que le pasa al jabalí? -pregunto curioso.

Ume: debe ser que le fue bien a en su salida -dijo divertida.

Nakime se mantenía callada pero tenía una sonrisa divertida no todos los días ves al siempre temperamental Inosuke feliz gritando como loco, puso su cabeza en el hombro de Ume, sabía que era una sentencia de muerte hacer eso delante de Gyutaro y Douma pero era uno de sus lugares favoritos para descansar la cabeza, el primero son las piernas pero ni loca hace eso delante de esos 2.

Kotoha: awww que lindas ¿No crees amor? -pregunto enternecida y sería.

Douma sonrió forzadamente ante la pregunta de su amada Omega, Gyutaro por otro lado se contenía de hacer una escenita delante de su madre y recibir un castigo.

Ume ignoraba las miradas de su padre y hermano y solo se concentró en darle mimos a su novia, sabía que Inosuke le pediría consejos o a Nakime, o a sus padres.

Inosuke llegó a su cuarto con una gran sonrisa, aunque estaba ligeramente enojado por lo que descubrió de su amado Genya pero del resto todo estaba bien.

Inosuke:¡Genial, todo está llendo bien si continúo así podré hacer que se enamore de mí! -grito alegre.

Se lanzó a su cama con emoción abrazo fuerte a su peluche de jabalí, cortesía de sus hermanos cuando era niño y tenía una máscara de jabalí un regalo de sus padres.

Inosuke: aaah lo único malo es ese perro rabioso que tiene por hermano mayor -dijo serio.

Soltó un suspiro irritado al recordar al mayor, no sabía el porqué Sanemi lo odiaba que él recuerde no le a hecho nada malo, quitando el hecho de que le quiere bajar al hermano y que pronuncia mal su nombre pero solo son detalles.

Inosuke:¡Eso nunca me detuvo, yo el gran Rey de la montaña Inosuke Hashibira, haré que Genya sea mi omega y no me importa nada de lo que diga ese feo albino! -grito determinado.

Douma:¡Ese es el espíritu mi pequeño jabalí! -dijo alegre.

Kotoha:¡No te rindas hijo!.

Gyutaro:¡Te apoyo hermanito!.

Ume:¡Así se habla hermano!.

Nakime: estoy ansiosa de verlos juntos.

Inosuke:¡Callense!.

Ume:¡A la próxima no grites fuerte como pendejo animal! -grito enojada.

Inosuke se puso colorado por las palabras de su hermana, se acostó en su cama con ganas de dormir y pensar en una buena idea de ganarse el corazón de Genya y no perder contra Sanemi.

Con los Kamado

Takeo llegó de lo más serio y molesto del mundo, jamás en su vida lo habían irritado tanto como ese grupito de idiotas.

Tanjiro:¿Pasa algo Takeo? -pregunto preocupado.

Takeo suspiro y se sentó junto a su hermano mayor para contarle lo que le sucede.

Takeo: hay un grupo de omegas que molestan a Senjuro y que me coquetean -dijo molesto.

Tanjiro: entiendo ¿Quieres un consejo de cómo hacer que lo dejen de molestar? -pregunto curioso.

Takeo asintió con la cabeza molestó con sigo mismo por no pensar en algo para ayudar a su amado Senjuro.

Tanjiro: 1. No deberías preocuparte por ello, Senjuro es fuerte -dijo con una sonrisa.

Takeo; lo sé, pero quiero cuidarlo y dejar en claro al resto que Senjuro no es feo o no merece estar conmigo -dijo serio.

Tanjiro: okey, 2. Solo debes esperar el momento indicado para darles a entender eso -dijo con una sonrisa.

Takeo pensó las palabras de su hermano y les encontró un poco de sentido, sonrió de manera dulce y abrazo a Tanjiro con cariño.

Takeo: gracias onii-chan, seré paciente para poder esperar el momento indicado de darles a entender a esos idiotas que Senjuro es hermoso -dijo con una gran sonrisa.

Tanjiro le sonrió de manera dulce a su hermano y solo le acarició el cabello con suavidad, Takeo se fue a su cuarto a descansar un poco y pensar en otros planes para poder conquistar a Senjuro.

Después de un tiempo Nezuko llegó con la mirada ligeramente perdida y muy pensativa, Tanjiro estaba en la cocina y vio con curiosidad y preocupación a su melliza.

Tanjiro:¿Pasa algo Nezuko? -pregunto con suavidad.

Nezuko: creo que Kanao oculta algo de su infancia -murmurró nerviosa.

Tanjiro:¿Por qué piensas eso?.

Nezuko: siempre utiliza blusas de manga larga, incluso en los días que hacen mucho sol, le pregunté pero creo que metí bien feo la pata -murmurró arrepentida.

La alfa soltó unas pequeñas lágrimas por lo que ocurrió, apesar de que Kanao no se había enojado para Nezuko le era difícil perdonarse por incomodar a su amada.

Tanjiro se acercó con calma y abrazo con cuidado a Nezuko para que se desahogara un poco.

Tanjiro: ya, ya, solo lo dijiste por curiosidad, no por otra cosa -dijo suave.

Nezuko: pero la hice sentirse incómoda, quiero que ella me ame y que confíe en mí -murmurró triste.

Tanjiro: ella confía en ti, sabes que ella fue adoptada por la familia Kocho, aún le debe ser difícil poder olvidar totalmente su infancia, debe ser por esa misma razón -dijo con suavidad.

Nezuko se calmó un poco y se sintió un poco mejor, aunque se sentía peor por haberle hecho recordar su mala infancia.

Nezuko: no ayuda mucho pero gracias Tanjiro, esperaré el tiempo que sea para que me lo diga -dijo con una sonrisa.

Tanjiro le devolvió la sonrisa a su hermana, Nezuko lo ayudó en la cocina y pasaron un rato de calidad de hermanos.

Después de almorzar Nezuko se fue a su cuarto pensando en como poder hacer que Kanao se fije en ella y no tenerle miedo a las hermanas mayores de ella.

Con Kanao

Kanao estaba dormida pero tenía una horrible pesadilla, o mejor dicho recuerdo.

Kanao: para... Por favor... -murmurró con lágrimas.

Shinobu y Kanae se acercaron al cuarto de la menor y entraron con una cara llena de preocupación.

Kanao: te lo ruego... Detente... -dijo aterrada.

Kanae: Kanao despierta, Kanao despierta -dijo con suavidad.

Shinobu: estamos aquí, nadie te hará daño Kanao -murmurró suave.

Kanao despertó con los ojos llorosos al ver a sus hermanas se asustó un poco.

Kanao: alejense...

Shinobu: Kanao somos nosotras, tus hermanas, nadie te hará daño -dijo preocupada.

Kanao se ocultó en sus sábanas temblando y llorando, Kanae tomo a Shinobu para que salieran del cuarto.

Shinobu: Kanae -murmurró molesta.

Kanae: esperemos a que se calme, parecía que no nos reconocía pero sabe que somos alfas -dijo sería.

Shinobu: pero...

Kanae: no te olvides que Kanao jamás nos dijo algo de su infancia, debió recordar algo y por ello la puso así, a la defensiva -murmurró preocupada.

Shinobu se mordió la lengua para no causar un escándalo, ambas estaban preocupadas por su hermana pequeña.

Kanao respiraba entrecortada sus recuerdos no eran tan así pero últimamente habían empeorado demasiado ¿Por qué?.

Continuará

Gracias por leer~

¡Aléjate De Mi Herman@!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora