YOUNG ROYALS 3: EL CAPÍTULO FINAL

2. VERDADES

Simon

Me vuelvo a poner la mochila y cojo mi abrigo mientras Wilhem entrelaza sus dedos con los míos. Salimos de la sala de música y seguimos a Jan Olof hasta la cafetería. Jan Olof se detiene antes de abrir la puerta.

-Sus majestades el rey y la reina le esperan dentro. Solo a usted. -dice Jan Olof indicándome con la mirada que no estoy invitado a entrar.

Miro a Wilhem y le aprieto la mano para infundirle tranquilidad.

-Eh, no pasa nada. Te esperaré aquí fuera.

Wilhem me mira y noto su respiración más fuerte y acelerada. Asiente con la cabeza, me suelta la mano, me mira una última vez y entra dentro de la cafetería con Jan Olof detrás de él, quien me cierra la puerta en las narices.

Miro a mi alrededor y me alivia ver que Hillerska sigue vacío. Me apoyo en la pared y espero con un tenso silencio como compañía. Sigo nervioso y desconcertado por lo que Wilhem ha dicho en el discurso. Después de ceder a estar con él en secreto hasta que cumpla los 18, jamás me habría imaginado que desafiara de esa manera a la casa real, a la monarquía, a su familia... Y jamás me había sentido tan orgulloso de alguien.

Pensé que jamás lograría volver a confiar en él, pero no tengo dudas de que me quiere y de que se sentía mal de verdad por lo que pasó. Todo lo que he hecho desde entonces ha sido para protegerme, pero él ha conseguido derribar todas mis barreras. Y ahora mismo solo quiero estar con él, sin importar las consecuencias.

Hablando de consecuencias, cojo el móvil para ver la reacción de la gente, y me encuentro con cientos de mensajes de mi familia y amigos. Se me había olvidado que esto también les afecta a ellos.

Tengo llamadas perdidas y mensajes de mi madre. Le mando un mensaje diciéndole que estoy bien y que no se preocupe, que luego hablaría con ella. Rosh y Ayub me han bombardeado a mensajes en mayúsculas, con emoticonos y "stickers" que reflejan su sorpresa, emoción y locura por lo que ha pasado. Les digo que ya hablaré con ellos en cuanto pueda regresar a Bjärstad.

Entro en Instagram, Twitter, Tiktok, y solo me salen publicaciones de Wilhem pronunciando las últimas palabras de su discurso. Leo los comentarios y todas las notificaciones que tengo con etiquetas en fotos de Wilhem y vídeos del discurso. Todo me recuerda a cuando August filtró mi vídeo íntimo con Wilhem, pero mucho más grande, porque esta vez es real al cien por cien, y nadie está esperando a que la casa real confirme o desmienta nada. Wilhem se ha encargado bien de eso esta vez.

"Sabía que era verdad que el príncipe sueco era el del vídeo"

"Por fin pasa algo interesante en la monarquía"

"Me encantan, me parecen super monos"

"Seguro que en la historia ha habido más príncipes y princesas homosexuales, pero creo que solo en este siglo podía pasar algo así. Al fin."

"El mundo ha evolucionado y las monarquías tienen que evolucionar con él"

"Yo apoyo a los futuros reyes suecos"

"El fin de la monarquía se acerca. Tengo curiosidad de ver cómo intentan tapar esto de nuevo, porque no podrán"

"Qué fuerte todo"

Me siento demasiado abrumado por todo y antes de apagar el móvil, no puedo evitar leer el mensaje de Sara que he estado tratando de ignorar.

-Lo siento, Simon. Yo lo arreglaré.

No sé a qué se refiere, pero ya no hay nada que pueda arreglar. Su traición ha sido lo que más me ha dolido en la vida. Incluso más que la traición de Wilhem. Sara, además de mi hermana, fue mi primera amiga y siempre ha sido la persona en la que más he confiado. Confiaba en ella a ciegas, tanto que ni si quisiera se me había pasado su nombre por la cabeza cuando me preguntaba quien le podría haber contado a August que le iba a denunciar a la policía.