34. EL PLAN SECRETO

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Simon

¿Qué acaba de pasar?

Si es verdad que sabía que Alexander, Wilhelm, Sara y Felice testificarían. Pensaba que solo Wilhelm me defendería. Sara ya me ha traicionado antes por August, y por mucho que pareciera arrepentida, no confiaba en ella. Felice pertenece a la nobleza, que es leal a la familia real por encima de todo. Me ha sorprendido que estuviera en nuestro equipo.

Pero... ¿La directora? Eso si que no me lo esperaba.

La directora acaba de mostrar pruebas que no se pueden negar. Pruebas que aseguran que Alexander no pudo grabar ni filtrar el vídeo.

Mi abogado me guiña un ojo, como si él ya supiera lo que iba a pasar. Miro a Wilhelm y veo como traga saliva, intentando ocultar la emoción que a mi también me ha traspasado por la ayuda de la directora.

August y su abogado se susurran algo, y el juez solicita la presencia de los testigos restantes. ¿Quién más queda?

Vicent y Nils apoyan la versión de que fue Alexander quien grabó y filtró el vídeo, pero con poco convencimiento en su voz. Está claro que, gracias a la directora, August y su equipo lo van a tener mucho más difícil de lo que yo pensaba.

Henry y Walter apoyan la versión de que fue August quien lo hizo, y ambos afirman haber visto pastillas en la mochila de August. Supongo que gracias a Wilhelm estoy haciendo nuevos posibles amigos.

Madison, Stella y Fredrika también apoyan la versión de Henry y Walter. Hasta Rosh y Ayub defienden la misma versión que han expuesto todos mis inesperados aliados.

También enseñan las conversaciones, incluyendo las fechas, donde digo que me había enterado por Wilhelm de que fue August quien nos grabó, y que Wilhelm lo había ocultado porque sabía que yo no tenía posibilidades de ganar el juicio. 

Toda la verdad está demostrada y, por primera vez desde que empezó todo esto, tengo la esperanza de que August va a pagar por lo que hizo.

Sin embargo, eso no quita que me vayan a expulsar de Hillerska por vender las pastillas...

August 3-11 Simon. 14 testigos habían participado, 11 me habían defendido a mi y 3 a August. Y con pruebas demostrables. Si me lo hubieran dicho al levantarme esta mañana, no me lo habría creído.

-Bien, según tengo apuntado, falta un último testigo. -informa el juez. -Que suba al estrado, por favor.

¿Un testigo más? Por más que pensara, no sé quien más podría participar en el juicio.

Unos pasos se escuchan acercándose al estrado.

Me giro, y cuando veo a la persona que se está acercando al juez y que me mira fugazmente, me paralizo.

Supongo que mi corazón sigue latiendo porque estoy vivo, pero no noto el oxígeno llegando a mis pulmones.

Todas mis células nerviosas se han detenido, intentando procesar lo que está pasando.

No entiendo nada.

***

2 semanas antes

Sara

Wilhelm se ha vuelto majara.

El plan que me ha propuesto es una locura, sobre todo porque, aunque el objetivo sea ganar el juicio, Simon nunca aprobaría este plan. Y Wilhelm lo sabe.

Se supone que voy a ayudarle y colaborar para recuperar a mi hermano, pero, si le perdí por culpa de mis mentiras, ¿cómo voy a recuperarle con más mentiras? En fin, supongo que ya da igual porque ya le he perdido.

YOUNG ROYALS 3: EL CAPÍTULO FINALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora