Quedate Conmigo 《Newt》 1° TEMPORADA

Capítulo 36: Detrás de los barrotes.

* Narra Newt *

¿Dónde los guardan? Ya tengo el alcohol y las vendas, sólo me falta eso...

Desde Enfermería, trataba de encontrar todo lo que posiblemente Ariana necesitaría, antes de que los "amiguitos" de Gally vinieran a buscarme por la fuerza.

- ¡Date prisa, viejo!- alguien alertó por lo bajo desde la puerta de la habitación- Tendríamos que estar hace horas dentro de ese pozo miertero.

- ¡Qué ya va, Minho!- seguía repasando ligeramente con la mirada las estanterías de los medicamentos- ¿Dónde los han guard...? ¡Aquí están!- tomé una aguja y un hilo especial.

- ¿Y eso para qué?- interrogó Brenda, quién había aparecido por el umbral.

- La herida de Ariana tiene que cerrarse de algún modo, ¿no?

- No eres Doc, Newt- el asiático rodó los ojos- Así como vas, terminarás por coserle el brazo en la frente.

- ¿Acaso no me tienen fe?- resoplé ofendido.

- Deja que yo lo haga luego- inquirió la pelirroja- Bien, asunto terminado. Vámonos de aquí antes de que nos encuen...

- ¡Oigan!- una voz varonil nos llamó desde el pasillo.

Me aproximé al umbral de la puerta hasta quedar junto a los otros dos y miramos por el extenso pasillo en dirección a la puerta principal.

- Casi nos matas del susto, Sartén- suspiró con alivio la de ojos verdes- No vuelvas a hacer eso.

- Lo siento- se disculpó.

- ¿Qué haces aquí, shank?- preguntó el asiático- Sabes que el idiota de Gally prohibió que cualquier Habitante se nos acerque.

Antes de responder, vino hacia nuestra dirección rápidamente, casi corriendo.
Un segundo después, se encontraba tumbado en el suelo, luego de haberse resbalado torpemente.
Dos objetos plateados salieron disparados de él y se deslizaron velozmente por el piso.

- Venía para darles eso- señaló lo que Minho estaba tomando entre sus manos.

- ¿Cilindros?- preguntó el corredor algo confuso y me tendió uno de ellos.

Sartén asintió mientras Brenda le ayudaba a incorporarse.

Examiné su contenido.

7. ESTIRAR

- ¿Estirar?- pregunté- ¿Qué dice ese, Minho?

El mencionado miró el objeto de metal y leyó- 2. CORRER

- Será mejor que ustedes conserven esas cosas- dijo el cocinero con las manos en sus caderas- Gally sería capaz de deshacerse de ellas y ninguno de nosotros puede ser descubierto con esos cilindros en nuestras manos.

- ¿Nosotros?- interrogó Brenda.

- Sí. Ya saben; Winston, Clint, Chuck y algunos más- mencionó- Estamos de su lado desde el principio. Tenemos la certeza de que ustedes son imprescindibles para ayudarnos a salir de aquí. Digan lo que digan, pueden contar con nosotros.

Minho palmeó el hombro de Sartén gentilmente- Me alegra saber que no estamos solos en ésto. Gracias, viejo.

- Lo mismo digo. No sé que haríamos sin ustedes- sonreí- Hey Minho, guarda esos cilindros.

El corredor obedeció y ocultó las pistas en su mochila de cuero.

- Haremos lo posible por ayudarles a sobrevivir en ese pozo maldito- prosiguió el cocinero mientras todos caminábamos hacia la puerta de salida de la Enfermería.