༶• 𝐍𝐚𝐲𝐞𝐥𝐢 •༶ ๑ 𝐴𝑜'𝑛𝑢𝑛𝑔 𝑋 𝑁𝑒𝑡𝑒𝑦𝑎𝑚 ๑

🌊ℂ𝕙𝕒𝕡𝕥𝕖𝕣 𝔽𝕚𝕗𝕥𝕖𝕖𝕟🌿

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Después de tanto tiempo, había llegado ese momento tan esperado.

La familia Sully podía sentir como si fueran a morir de los nervios. Todos mantenían un rostro inexpresivo, estaban preocupados.

Pues, en aquel momento, Neteyam estaba en una habitación apartada de todos, se encontraba en la Sala del Árbol de las Madre, lugar en que todas las hembras Omaticayas dieron a luz a sus bebés. Era una habitación sagrada, al tener la energía espiritual de todas aquellas madres han dado a luz por generaciones. No solo ellas, si no, también lo hicieron los machos bendecidos por la Gran Madre meses antes , llegando a tener esa habitación un ambiente aún más sagrado.

Jake sujetaba con firmeza la mano de su esposa, la cual estaba inquieta y asustada. Kiri y Spider se encargaron de estar junto a la preocupada Tuktirey, quien estaba con sus ojitos llorosos por no saber lo que pasaría. Y Tsireya estaba abraza a Lo'ak, ambos con una notable preocupación en sus rostros.

La Tsahìk era una de las que se encargaba de llevar a cabo el proceso del parto, acompañada de otras Na'vis.

La preocupación de todos aumentaba cada vez más.

Había pasado más tiempo del que se tenía pensado. Tanto Neytiri como Lo'ak comenzaron a soltar lágrimas. Sollozos se escuchaban por parte de Tuk, la cual estaba siendo calmada por su hermana. Tsireya se acercó a Neytiri y Jake a acompañarlos a ambos, pues se podía ver como las manos de Jake temblaban a más no poder.

Y aún que Jake no lo demostrará, por dentro se estaba rompiendo. Quería llorar. Quería ir a ver a su hijo. Quería comprobar como estaba, como se sentía.

Hubo momentos en los que incluso Neytiri quería ir corriendo a la sala en la que estaba su hijo. Tenía su rostro mojado por las lágrimas que brotaban de sus ojos, su cuerpo temblaba y no podía permanecer de pie.

Tsireya miraba con preocupación a Lo'ak, pues el joven tenía su mirada perdida, tenía lágrimas secas en sus mejillas. Y en esos momentos, se escucharon los primeros sollozos de Kiri.

Aquel miedo invadió el ambiente. Miedo y tristeza, era lo que se podía ver en los presentes. Miedo, a que algo saliera mal, pues nadie sabía lo que estaba sucediendo en la habitación. Sólo la Tsahìk lo sabía.

- Ma'Itan... Neteyamur...-habló con voz rota Neytiri. Como si llamara a su hijo, estiro su mano en la dirección de la habitación, como si esperara a que Neteyam saliera y tomara con fuerza su mano.

- Amor...-llamó Jake en un susurró poco audible.

Jake se abrazo a su esposa por los hombros, sintiendo las temblorosas manos de ella posarse sobre su antebrazo. Sintió la presión en el agarré de Neytiri, y eso le rompía aún más el corazón.

Odiaba ver a su esposa en ese estado, era algo que él no podía soportar, odiaba ver el hermoso rostro de su amada lleno de lágrimas. Odiaba que llantos y sollozos salieran de sus labios. Simplemente Odiaba ver sufrir a Neytiri. No lo soportaba.