No muchos logran tener una mañana pacífica. Algunos podrían despertar de malas, otros con cansancio, incluso sin fuerzas.
Y Ao'nung estaba lidiando con aquello.
Tenía la esperanza de despertar como todas las mañanas. Pero, el llanto de la pequeña, quien anhelaba la presencia de su padre, no se lo dejo tan fácil. Nayeli estaba acostumbrada a despertar en los brazos de Neteyam, por lo que al no tener su presencia, comenzó a llorar de manera desconsolada. Un llanto que, ni siquiera Ao'nung podía calmar.
No tuvo más opción que llevar de regreso a su pequeña con Neteyam. Después de todo, era obvio que iba a extrañarlo después de estar toda la noche sin él. Por que vamos, ¿Quién no lo haría?
Desde que ambas familias sabían de Nayeli -hablando por Ronal y Tonowari-, Neteyam había dejado que su hija pasara una que otra noche con Ao'nung y su familia. Siempre y cuando, cuidarán en todo momento a Nayeli.
Estaba de más decir que tanto Ronal como Tonowari amaban a la niña. Pero, tenían que pelear constantemente con su hijo menor, pues se podría decir que, la sobreprotegía demasiado. Esto no les molestaba, al contrario, se les hacia tierno ver como Ta'rik amaba y protegía a su pequeña sobrina, a pesar de ser aun un niño.
Con el sol apenas saliendo, la mayoría de los Metkayinas comenzaban a dejar sus hogares para iniciar con sus tareas. Y, en el hogar de la familia Sully, apenas y habían despertado, Neytiri apresurando a sus hijos a despertar para luego comenzar a picar en pequeños cubos fruta.
Entre aquellas, la que más resaltaba, era la rojiza fruta con la que llegó su primogénito anoche. Tenía que reconocerlo, aunque su color fuera muy llamativo, no era una fruta muy buena a la vista, a pesar de ser jugosa por dentro, no despertaba el apetito en ella.
Pero, no podía juzgar, tal vez su sabor sea distinto a su aspecto. Tendría que probarla para averiguarlo.
Los frutos de la Isla eran muy diferentes a los del bosque, muchas veces se había negado a probar bocado de algún fruto, pues aseguraba que no le gustaría. Y no fue hasta que su pareja le insistió tanto, que termino probando uno que otro fruto, y si, terminaron gustándole. Tal vez sólo estaba suponiendo antes de tiempo.
Mientras esperaba que su familia hiciera acto de presencia, detrás suyo se escucho una pequeña risilla, acompañado con un "Buenos días". Reconocía la voz, y aquella dulce risa. No necesitaba voltear para darse cuenta de que se trataba de Ao'nung, acompañado de Nayeli.
—¿Está dando problemas muy temprano?.—Neytiri se levantó sonriente, caminando en dirección a la pequeña.
Nayeli no tardo en extender sus brazos hacía ella, y obviamente, Neytiri no tardo en cargarla en sus brazos y dejar un beso en su mejilla.
—No, sólo se levantó extrañando a Neteyam, así que la traje de vuelta.
—Seguro no tuviste tiempo de comer algo, ¿Quieres pasar?.—se hizo a un lado para dejar pasar al Metkayina, dándole una sonrisa.
Ao'nung no iba a rechazar la amable propuesta de Neytiri, por lo que termino por entrar, escuchando detrás suyo, las pequeñas risas de la bebé.
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༶• 𝐍𝐚𝐲𝐞𝐥𝐢 •༶ ๑ 𝐴𝑜'𝑛𝑢𝑛𝑔 𝑋 𝑁𝑒𝑡𝑒𝑦𝑎𝑚 ๑
DiversosNeteyam y Ao'nung han mantenido un romance secreto desde los 16 años. Al cumplir la mayoría de edad, el Olo'eyktan de Metkayina, Tonowari, y la Tsahìk, Ronal, comienzan a presionar a Ao'nung sobre buscar una pareja para cuando él sea nombrado nuevo...