El agradable sonido del viento, acompañado con las olas golpear entre si, haciendo un encantador ambiente. Con cuidado él mecía en sus brazos a la bebé, ahora envuelta en una manta, la noche se hizo más fría de lo normal, y para evitar que la pequeña pasara frío, Ao'nung la cubrió con una manta tan pronto sintió sus mejillas algo frías. Él estaba agradecido con que aquella pequeña se encontrara tan tranquila en sus brazos, no había soltado ningún sollozo desde que él la tomó en brazos y comenzó a mecerla para tratar de hacerla dormir.
Pero claro, aquellos intentos fueron inútiles, pues la pequeña se negaba a cerrar sus ojitos, sólo se quedaba mirándolo con cierto brillo en sus hermosos ojos dorados. Él supuso que probablemente tenía hambre, ya que Tsireya le dijo que no había querido comer en todo el día, comenzó a ver a su alrededor en busca de lo necesario para hacer lo que le daría de comer a la pequeña.
¿Qué si él sabía cómo hacerlo?. Claro que sabía, y todo gracias a su madre. Cuando su hermana nació, Ao'nung recuerda que su madre le enseñó la forma de alimentar a su hermana en caso de que ella no se encontrara allí, era una mezcla que servía igual de bien que la leche materna. Sólo necesitaba unos frutos a los cuales podría sacarle el néctar, así serviría como un alimento nutritivo para la pequeña niña.
A pesar de estar cuidando a la bebé, y de estar preparando su alimento, no dejaba de asegurarse de Neteyam. A cada minuto se aseguraba de controlar sus síntomas, procuraba de no tocar las heridas de su rostro, ni de mover tanto los vendajes de su cuerpo. Una parte de él se sentía aliviado de ver que todo estaba en orden, pero la otra parte estaba preocupada, Neteyam aún no mostraba señales de despertar en algún momento.
Un suave y débil jalón de su cuello llamó su atención, haciendo que bajará su mirada hacia la bebé.
—¿Te gusta el collar?.—le hablo entre bajas risas. La bebé se encontraba jalando del collar que tenía, noto que lo que más le llamó la atención era el diente que tenía en medio, y cuanto noto eso, no dudo en quitarse el collar y dejarlo delante la bebé.
Era una pequeño juego que inició, en el cual, Ao'nung balanceaba el collar de un lado a otro frente a Nayeli, ella lo seguía con la mirada e intentaba atraparlo, siendo muchas las veces en las que Ao'nung la dejaba ganar, observando con gracia en como la bebé intentaba morder el diente pero fallando en el intento, pues él se lo quitaba antes de que se lo llevara a la boca.
Aquella pequeña era tan encantadora como Neteyam, Ao'nung incluso olvidó que podía tratarse de la hija de otro Na'vi, él simplemente no podía evitar a la pequeña. Sus dulces risas, su fuerte agarre, incluso los pequeños balbuceos que soltaba, todo le llamaba la atención de la pequeña, sobre todo aquellos hermosos ojos dorados, le recordaban demasiado a Neteyam, y Ao'nung juraría que aquella bebé es la copia exacta de Neteyam. Tenía aquel instinto de querer tenerla junto a él en todo momento, de protegerla y amarla... Sin duda era extrañó.
Juego tras juego y risas de por medio, luego de alimentarla, la bebé por fin cayó dormida en los brazos del Metkayina. Ao'nung con el mayor cuidado posible, acomodó el pequeño cuerpo de la bebé en el portador que Tsireya estuvo usando con la pequeña, cuando la dejó acomodada, continuó meciéndola con tranquilidad, mientras la observaba dormir. Pero claro, su mirada se desviaba hacia Neteyam en repetidas ocasiones.
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༶• 𝐍𝐚𝐲𝐞𝐥𝐢 •༶ ๑ 𝐴𝑜'𝑛𝑢𝑛𝑔 𝑋 𝑁𝑒𝑡𝑒𝑦𝑎𝑚 ๑
AcakNeteyam y Ao'nung han mantenido un romance secreto desde los 16 años. Al cumplir la mayoría de edad, el Olo'eyktan de Metkayina, Tonowari, y la Tsahìk, Ronal, comienzan a presionar a Ao'nung sobre buscar una pareja para cuando él sea nombrado nuevo...