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Alessio

Llevaba más de tres horas conduciendo hacia ninguna parte y casi el mismo tiempo desde que apague el móvil por todas las llamadas y mensajes que estaba recibiendo.

Necesitaba irme de la que había sido mi familia mi casa toda la vida para verlo con otra perspectiva.

Pero solo veía negro. Me daba rabia recordar como me habían mirado todos como si fuera una bomba a punto de explotar.

¿Quiénes lo habían sabido? Intuyo que mis "tíos", "padres"... lo que no sabía era porque lo sabía Nevio y me preguntaba si mi hermano también lo sabía.

Y si no lo sabía igual hasta se alegraba, al final sería suyo el cargo de Consigliere y era el único heredero real.

Siempre había sido distinto a los demás Falcone, igual cuando era pequeño era más obvio y al crecer con ellos me había moldeado a su forma de ser. Pero mi destino no era pertenecer ahí.

¿Por qué me adoptaron? ¿De donde? ¿Quiénes eran mis padres biológicos? ¿Por qué me había adoptado Nino y Kiara? Es que fácilmente podía haberlo hecho Remo y Fina o Aurora y Fabiano...

Pero no, habían sido ellos, los que siempre había querido tantísimo. Kiara me había protegido a su manera, siempre con su forma dulce y su paciencia infinita y Nino imaginaba que me quería, al menos eso era lo que siempre había pensado.

No era el más cariñoso ni expresivo del mundo, pero sabía que estaba orgulloso de mi, de quien era y de lo que hacía.

Miles de recuerdos se acumulaban en mi cabeza, ¿toda mi vida era ahora mentira?

Y de repente caí en la cuenta de algo: Isabella.

¿Cómo iba a arrastrar a Isabella conmigo? No podía dejarla caer cuando todo saliera a la luz. No se merecía tener hijos de alguien no legitimo ni cargar con el peso de ello todo el resto de su vida.

Isabella era de sangre italiana, se merecía una descendencia a su altura y yo ya no era válido para ello.

Aparqué el coche cuando me di cuenta de algo tan simple como que mi compromiso se rompía con esto. Precisamente porque en estos meses había crecido mis sentimientos dentro de mi y quería a Isabella, por eso mismo no podía dejarla caer conmigo.

Pero necesitaba verla una última vez antes de nada. Seguramente abandonaría la Camorra, se lo debía a las personas que siempre me habían cuidado.

Encontraría mi sitio en alguna parte o eso esperaba al menos.

Isabella

Más de 24 horas sin señales de Alessio.

Me sentía morir un poco a cada rato pero no me había atrevido a preguntar.

Intuía que si le hubiera pasado algo avisarían a mi familia y ellos a mi, ¿no?

Pero estaba siendo cobarde y era algo que había jurado no volver a ser, a si que mientras me ponía el pijama tome la decisión de que mañana pediría explicaciones a mi tío y si no sabía nada iría en persona hasta Las Vegas.

Me tumbe en mi sofá intentando relajarme, pero me era imposible, mi cabeza iba todo el rato a unos ojos azules.

De repente sonó el telefonillo. Era más de medianoche y solo el portero podía contactar conmigo a estas horas a si que mi corazón de salto un latido porque solo se me ocurría una cosa.

Against Fate (fanfic Isabella y Alessio)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora