Against Fate (fanfic Isabella y Alessio)

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Isabella

Un mes después de la visita al ginecólogo todo seguía en punto muerto entre Alessio y yo.

No se había ido de la habitación pero tampoco hacía ninguna referencia en cuanto a nuestra hija y eso me tenía destrozada.

Yo ya no sabía si era orgullo o si realmente seguía pensando que este bebé era de Nevio, pero a veces sentía que ya no me importaba.

Otras veces si me importaba y me dolía. Y me apetecía ir hacia él y decirle por favor escúchame porque este es nuestro bebé. Pero entonces acababa echándome para atrás y pensando: si quiere algo lo buscará.

Pero él no buscaba nada y yo me cansaba de esperar.

Estaba ya de cuatro meses y mi familia todavía no lo sabía. Hace más de dos meses que vivía en Las Vegas y desde hace uno que no había vuelto a quedar con ellos porque ya era algo obvio a la vista.

Me había enterado de que Alessio, Remo, Savio y Fabiano se iban a ir a hacer visitas a los lugartenientes y yo había decidido irme un par de semanas aprovechando que no estaba a Nueva York.

Porque sin quererlo seguramente, pero Alessio se había convertido un poco en mi sombra. Casualmente siempre aparecía por la casa cuando decidía salir a algo y por eso sabía que no me dejaría irme sin él.

Pero necesitaba poner distancia a esto y ver todo desde otra perspectiva además de contarles a mi familia la noticia.

Así que le había pedido a Valerio que viniera a por mi y ya irnos juntos con la excusa de su visita. Podía haberle pedido el favor a Nevio y sé que me hubiera acompañado pero no quería causarle más problemas y además estaba muy protector con Aurora ahora que Fabiano se iba a ir también.

No sabía como despedirme el día que se fue Alessio, por lo que decidí hacerme la dormida cuando le escuche levantarse y empezar a arreglarse.

Lo que no me esperaba fue el beso que dejo en mi cabeza y las suaves caricias que le dio a mi ya notable barriga antes de irse. Habían sido tan sutiles que si no hubiera estado con todos mis sentidos alerta ni me hubiera dado cuenta.

Pero era la primera vez que me acariciaba la barriga y volví a sentir esas mariposas previas a todo este desastre.

Una pena que mi decisión estuviera ya tomada y que siguiera sin reconocer su error. Como buenamente pude volví a coger el sueño.

***

Valerio fue súper puntual y la cara que puso al notar mi tripa no tuvo precio. Estaba alucinando y yo solo podía sonreír como una tonta.

- Vas a ser tío otra vez, te haces viejo. - Y me abrazo tan fuerte que volví a sentir que pertenecía a alguna parte aún estando en Las Vegas.

Había dicho a los Falcone que estaría en el hotel de Valerio, aunque Nevio si que sabía mi paradero por si algo se complicaba pudiera localizarme.

Era increíble como aun sin apenas hablarnos, confiaba en Nevio alrededor mío casi como si de un primo mío se tratara.

Valerio no paro de hacer preguntas en todo el viaje: que porque no lo había contado antes, que desde cuando lo sabía, que si por eso me había casado... Y mis respuestas eran parte de verdad y parte de mentira, pero no quería preocuparlo de momento.