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Isabella

Llevaba ya dos semanas en Las Vegas y cada día era un infierno.

Nevio ya me había contado que Alessio dijo a toda la familia que nuestro bebé era de Nevio y no sé si eran imaginaciones mías pero me sentía juzgada todo el rato.

Es verdad que yo no salía apenas de mi ala, pero tampoco habían hecho nada para que me sintiera cómoda compartiendo espacios con ellos.

Alessio dormía en el ala de sus padres y solo coincidíamos en alguna cena. Nunca me preguntaba que tal estaba si quiera y yo no iba a darle ninguna explicación. Y quien quisiera creer su versión haya él.

Ya tenía claro que cuando esté bebé naciera y tuviera el apellido Falcone me volvería a Nueva York. Sólo había llegado hasta aquí porque no iba a tener un hijo y pedirle a otro hombre que le diera su apellido. Además de que un embarazo se puede adelantar un mes, pero si lo hubiera alargado en el tiempo todo el mundo hablaría.

Yo quería que mi hijo/a naciera sin esos prejuicios. Sabía lo duro que podía ser el mundo de la mafia con bebés concebidos antes del embarazo o sin padre y por eso seguía aquí.

Este niño era de Alessio, no había otra opción. Me da igual como pasará, pero el único que pudo colaborar en este embarazo fue él.

Esa tarde alguien llamó a mi despacho. Nuestro ala tenía tres habitaciones y una de ellas la había adecuado a ser mi sitio seguro. A si que aquí mataba mi tiempo libre entre estudios, lecturas y con la seguridad de la Famiglia y la Camorra.

La Famiglia era lo único que calmaba la ansiedad en mi pecho. Me había ido y aún así me sentía más de ahí que nunca y es que no habían dejado de contar conmigo para nada.

Los chicos que había formado me daban un parte diario normalmente y me llamaban cuando necesitaban. Había asistido a reuniones con mi familia por videoconferencia y me habían tenido tan en cuenta como siempre.

Me sorprendió cuando la persona que entró en la habitación fue Aurora.

Sin duda ella me había estado evitando de forma consciente. Era mi prima y habíamos tenido contacto por medio de Greta sin problema. Parecía que también me juzgaba por delirios de Alessio.

- Aurora. - Dije poniéndome de pie.

- Hola Isabella. ¿Podemos hablar? - Dijo muy seria mirándome fijamente.

- Claro, pasa. - La invite con la mano a que se sentara delante mío.

- Se que puede parecer extraño que yo te haga esta pregunta pero probablemente sea a quien más afecte si es verdad. Bueno después de Alessio claro... ¿él bebé es de Nevio? Sé que me vas a decir que no pero todos podemos ver como te ha tomado como su protegida y eso no es algo que él haga normalmente. - Soltaba todo de golpe e iba frunciendo el ceño cada vez más. - Os doy la enhorabuena si es así pero...

- Aurora. No hay forma posible de que esté bebé sea de nadie más que de Alessio. - Vi su mirada insegura. - ¿Crees que me casaría con él si fuera de Nevio? Porque ya te digo yo a ti que no. Si realmente hubiera posibilidad de que fuera de él no me habría casado con ninguno hasta asegurarme o hubiera obligado a Nevio a hacerse responsable.

Against Fate (fanfic Isabella y Alessio)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora