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Isabella

Hacía tres meses desde mi vuelta de Nueva York y habíamos caído en una rutina de la que no veía el fin.

Ya estaba de siete meses y medio pero Alessio se pasaba el día trabajando. Estaban en guerra abierta con los Cavallero y habían caído ya muchos soldados, aunque muchísimos más del Outfit.

De la noticia me enteré días después de llegar. Alessio intentaba estar conmigo pero noté continuamente que le reclamaban y al final acabo contándomelo.

No me quería dejar sola, pero también entendía que era algo que necesitaba y no podía interceder ahí. Lo que no pensaba es que esto se iba a alargar tanto.

Intentaba dormir siempre en casa pero muchos días no podía. Mis padres me insistían en que fuera a Nueva York con ello que íbamos a estar más seguras la niña y yo, pero no veía como planteárselo a Alessio.

Sabía que se estaba esforzando mil veces más por nuestra hija, para que la noticia de su adopción no repercutiera en ella en un futuro. Además de la venganza a nivel personal que tenía contra Leonas y Dante. Pero como todo se había complicado ahora también tenía que mirar por nuestra seguridad, total que en resumen le veía a la hora de dormir con suerte y al despertar según la suerte que tuviera.

La familia Falcone se preocupaba muchísimo por mi. Mi suegra estaba todo el día pendiente de mi alimentación, que no me aburriera, que hiciera ejercicio, que estuviera tranquila...

No me dejaban involucrarme y sabía que tampoco conocía toda la información de lo que estaba pasando pero estaba aburrida de intentar averiguar más cosas.

Alessio y yo teníamos relaciones sexuales de forma muy frecuente porque mis hormonas estaban alteradidimas y él obviamente estaba encantado con ello.

Cuando coincidíamos despiertos era básicamente eso: tener sexo, contarle mi día, hablar de como me encontraba con el embarazo, que tal estaba la niña... él me hablaba un poco de cómo iba todo, pero no me decía ni una décima parte y de eso estaba segurísima.

En dos días tenía revisión, ya se lo había dicho hace un par de semanas pero estaba tan cansado cada noche que no sé si quiera si me escucho.

Pero tenía claro que no iba a ir detrás de él. Yo entendía que tuviera la necesidad de impartir venganza, pero me aburría que todo se parara por eso.

Nuestra hija ni si quiera tenía nombre todavía y no habíamos hablado más de nuestros planes de futuro. A veces pensaba que simplemente había dado por hecho que me quedaría y otras que no quería preguntar por no escuchar la contestación.

Alessio

Isabella tenía hoy cita médica y quería acompañarla. Tenía claro que ella pensaba que no me acordaría pero todo lo que me decía lo tenia apuntado en notas porque no quería perderme ni un detalle. Pero a veces el cansancio jugaba malas pasadas así que prefería ir sobre seguro.

Había pasado la noche fuera, aunque había dormido más bien poco pero siendo las doce seguro que me daba tiempo a dormir un rato.

Cuando llegue me encontré a Isabella en la terraza cogiendo los primeros rayos de la primavera. Estaba preciosa en ese vestido y no pude evitar sonreír.

Against Fate (fanfic Isabella y Alessio)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora