Seokjin despertó aturdido y totalmente vestido aún, incluso llevaba puestos los zapatos. Supuso que habría dormido un poco, pero no demasiado. No había mirado el reloj antes de lanzar el último cuadro bajo la cama y de acurrucarse sobre ella.
Nunca había pintado a la luz de la lámpara, claro que tampoco lo había hecho con lágrimas en los ojos. No estaba contento con el resultado: Jungkook, echado dobre un montón de heno y desabrochandose la camisa con una expresión tan sensual que no habia duda de lo que estaba pensando, o de lo que iba a hacer.
Era una imagen que jamás olvidaría, aunque no la hubiese plasmado en un lienzo. Los detalles eran exactos, hasta la mancha marrón en una de las mangas y la pequeña cicatriz en forma de media luna sobre su ombligo. Se parecía tanto a él, que no podía mirarlo demasiado rato sin notar ese cosquilleo en el estómago. Pero no era un cuadro que pudiera enseñar a nadie, asi que se quedaría bajo la cama.
Tendría que destruirlo, si bien no reunió fuerzas para hacerlo. Debería enrollarlo cuando se hubiera secado del todo y esconderlo donde Rita y Namjoon no fueran a encontrarlo mientras limpiaban.
Todavía estaba sentado en la cama pensando en ello cuando la puerta se abrió sin avisar. Taehyung era el único que entraba sin llamar y, por supuesto, alli estaba su hermano, apoyado en el marco. De nuevo, iba solo medio vestido, aunque hoy llevaba una camisola blanca de encaje. Sujetaba un abanico, pero en ese momento no lo estaba usando.
Como era de esperar, sonreia con petulancia. De hecho, no sólo contenía triunfo y risa, sino también el conocimiento de algo secreto, su sonrisa era mucho mas petulante que de costumbre.
—¿Que quieres, Tae?
—Oh, nada en particular— contestó Taehyung haciendo girar el abanico por la cinta que lo unia a su muñeca.
—Entonces cierra la puerta al salir, por favor.
—¿Cómo? ¿No me felicitas? Vendrás a la boda, ¿Verdad?
Sólo le faltaba reirse. Seokjin se preguntó como su hermano lograba contenerse. Tal vez porque quería preparar el terreno para algo que ke resultaba más gracioso aún.
Dado que Seokjin iba vestido y la cama estaba hecha, con solo una arruga o dos en la colcha, Taehyung no podia suponer que acababa de despertarse, lo que habría demostrado que había pasado muy mala noche. La sospecha de que Taehyung había ido a desquitarse un poco más lo despertó de golpe. Decidió atemperar un poco el regodeo de su hermano antes de que se desatara por completo.
—No me perdería tu boda por nada del mundo, Tae. Llevo años esperando que llegara este día para poder llevar una vida normal, contigo fuera de ella.
—¿Prometes no llorar demasiado fuerte cuando avance por el pasillo para reunirme con él?
—Bueno, teniendo en cuenta que solo ha faltado que le apuntaran a la cabeza con un revólver, puede que las lágrimas resultarán inadecuadas. Aunque no se puede considerar que se haya obligado a alguien a hacer algo si lo hubiera hecho de todos modos por su cuenta. Es algo que depende del momento en que ocurre. De modo que si, creo que podre contenerme.
El tono despreocupado de Seokjin había conseguido adoptar provocó que Taehyung torciera los labios, irritado.
—No trates de aparentar que no te importa.
—Ahi tienes otra cosa que depende del momento en que ocurre. Ayer por la mañana seguramente me habría importado. Esta mañana, no, me temo que no.
—¡Eres un mentiroso! Sabes que lo quieres si no, jamas te habrías revolcado con él en la cuadra.
La ordinariez de Taehyung consiguió sonrojar a Seokjin.
—Mira quién habla— exclamó —. El que ha tenido media docena de conquistar sórdidas o más. Pero ahora, por lo menos, ya has hecho creer a tu marido que él fue el primero en tocarte. Bravo, hermanito, eso ha sido genial, incluso para ti.
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Un Hombre Para Mi (KookJin)
FanfictionEsta adaptación sera KookJin, creditos a su creadora original Johanna Lindsey Los gemelos Kim, Taehyung y Seokjin pueden parecer idénticos, pero Taehyung es caprichoso, temperamental y muy vanidoso, mientras que el enérgico Seokjin esconde su belle...