Un Hombre Para Mi (KookJin)

Capitulo 35

Taehyung cerro la puerta de golpe al salir. Seokjin se sorprendió de tener ganas de sonreir. Si habia aprendido algo de su hermano con los años, era a hacer una buena actuación, y acababa de hacer una digna de un profesional. Pero la cuestión era, ¿habia funcionado? No es que fuera a cambiar nada, aparte de ahorrarle más regodeos de Taehyung.

Taehyung seguía queriendo un marido, y cuánto antes mejor. Seokjin solo habia eliminado una de las razones por las que aceptaba a Jungkook en ese papel. Las demas  seguían siendo válidas: él queria, Dami le daba su consentimiento, la boda se celebraría pronto. Si nadie mas llamaba la atención o captaba el interes de Taehyung antes de la fecha que su tia fíjara para la boda se casaría con él.

Seokjin recogió las gafas rotas del suelo. Las observó un largo instante. Podría reemplazarlas. Tenía otro par. Pero ¿para que? No era como si estuviera en Haverhill, donde todos los días habia hombres que visitaban a Taehyung, y alguno de ellos podrían preferirlo a él.

Lo que si necesitaba era un guardarropa nuevo. No habia elegido colores apagados porque le gustaran, sino porque aumentaba su <<invisibilidad>>. Pero había terminado con aquella farsa. Y si Taehyung se sentía amenazado por volver a tener competencia, peor para él.

Se quitó la ropa con la que habia dormido y se puso una camisa blanca, al menos, era de un color neutro. En cuanto al pantalón, detecto el pantalón de montar que  le había dejado su tia, el que habia llevado puesto la mañana anterior...

No iba a llorar otra vez. Tendría que dejar de lamentarse por su perdida, y lo mejor era que empezará ya.

Todavía tenía que aprender a montar, pero no iba a permitir que él terminará de darle la lección. Además, por lo menos sabía lo elemental para preparar un caballo y mantenerse sobre el, si casi todo el mundo cabalgaba en aquella parte del país. Estaba resuelto a aprender el resto solo.

Se puso el pantalón de montar y salió de su habitación. Namjoon eligio ese momento para llegar, y tras llamar un momento, asomó la cabeza por la puerta.

—¡Caramba!— exclamo enseguida al percartarse de que el cambio de aspecto de Seokjin era deliberado—. Ya era hora

—Todas mis razones par esconderme han desaparecido—explico Seokjin, que habia logrado no sonrojarse.

—Ya me he enterado— aseguró Namjoon, con la voz teñida de indignación— tu hermano no podia dejar de alardear de ello mientras le recogía la ropa sucia ayer por la noche —aclaro y después añadio vacilante —. ¿Quieres que hablemos?

—No.

—Ya me lo imaginaba. Pero cuando te apetezca, ya sabes donde encontrarme. ¿Te gustaría que te arreglase el peinado, o vas a llevar el pelo asi, suelto?

—Me apetece llevarlo suelto, pero supongo que seria llegar un poco demasiado lejos en el sentido contrario.

—Tendre que cortarte la parte del fleco  —advierte namjoon — no mucho, para que puedas seguir recogiendolo, como él, cuando sea necesario.

—No me hagas el mismo peinado que a él— pidió Seokjin—. Todos esos peinados que se hace son demasiado recargados para mi gusto.

  Namjoon no tardo mucho. Tenia mucha maña creando peinados que, aunque no estaban de última moda, favorecían mucho a la persona. Y satisfizo los deseos de Seokjin..

—Yo iría a hacerle una visita para presumir— sugirió Namjoon— pero yo soy asi, tu eres demasiado bueno para seguirle el juego.

Seokjin sonrió, cuando los dos hablaban, no necesitaban decir su nombre.

—No va a ninguna parte y, ademas, ya sabe que he dejado de esconderme. Ahora mismo tengo una cita con un caballo.

Esperaba que la cuadra volviera a estar vacía. El vaquero que se ocupaba de los caballos podía haber vuelto al trabajo, pero si todavía estaba enfermo, se pasaría la mayor parte del dia descansando. Aun asi, hecho un vistazo al reloj  antes de ir para allá, porque no estaba seguro de que hora era. Al rededor de mediodia a juzgar por la situación del sol.