Líneas del destino. FreenBecky

Ego

POV FREEN

Al despertar me dirigí al baño para tomar una ducha, cada gota que caía sobre mi espalda ardía como el mismo infierno, no podía moverme ágilmente porque el dolor incrementaba en cada movimiento, cuando salí de la regadera me puse de espaldas al espejo de cuerpo completo que tenía ahí, giré mi cabeza sobre mi hombro para ver la marca rojiza que nacía en mi espalda baja hasta mi dorso derecho. Recordé la suave caricia que Rebecca había depositado sobre ella la noche anterior y el dolor pareció disminuir. Cerré los ojos y mi mentí voló.

Recordaba estar boca abajo en la cama mientras su mano levantaba mi hoodie haciendo que mi piel sintiera el clima frío calar. Sentí mi cuerpo temblar contra la yema de sus dedos al primer toque, le había dicho que temblé por lo frío de la crema. No podía decir que era por la descarga eléctrica que recorrió mi cuerpo al sentir sus dedos sobre mi piel, al tenerla tan cerca.

Continuó esparciendo delicadamente el desinflamatorio por toda la zona inflamada y yo solo pude enterrar mi cabeza sobre la almohada, apretando los ojos, controlando mi respiración y memorizando el movimiento de sus dedos contra mi espalda.

Sentía el calor emanando de sus yemas, mi piel colapsando y erizándose en cada centímetro que tocaba. Noté el nacimiento de mi humedad entre mis piernas. Cerraba los puños bajo la almohada para evitar girarme y hacerla mía en ese momento. Cerré los ojos más fuerte.

Deseé que volviera a poner sus dedos en mi piel cuando el contacto desapareció, ella bajo mi hoodie y mi piel quemaba necesitando más de ella.

La sentí levantarse y la escuché susurrar algo que no logré entender antes de salir de mi habitación. Aún cuando ya se había ido no me moví, su contacto me había dejado congelada. Me quede en esa posición repitiendo en bucle la sensación de sus dedos contra mi piel hasta quedarme dormida.

Abrí los ojos y fruncí la nariz, suspiré volviendo a la imagen del espejo frente a mi.

Me vestí y fui al aula. Nam me preguntó qué si ya me sentía mejor y solo asentí. El profesor de Bursátil entró y comenzó la clase, mire hacia atrás al escrito de Rebecca pero solo estaba Irin.

Al término de las clases Nam, Heng, Non y yo fuimos a la biblioteca para terminar el ensayo que debíamos entregar para la clase de literatura.

Entramos a un cubículo y nos sentamos en la mesa. Yo consultaba un libro sobre El arte barroco mientras tecleaba en mi laptop las ideas más sobresalientes de los autores. Heng que estaba sentado frente de mí peleaba con su celular presionado rápidamente contra la pantalla. Nam sentada a lado de Heng mantenía la vista fija en el techo con el ceño fruncido y después escribía en su iPad, repetía la acción varías veces.

-Hoy no ha venido mi novia a clases - Non rompió el silencio. Y todos volteamos a verlo.- Rebecca- concluyó.

-Irin le dijo a Noey que tenía dolor de cabeza o algo así, por eso no asistió - dijo Nam con su vista perdida de nuevo.

-Es tan guapa ¿no creen? - dijo Non y yo solo apreté el libro entre mis manos fingiendo leerlo.

La risa de Heng fue tan fuerte que no pude evitar alzar mi vista para mirarlo.

-No pierdas tu tiempo, pequeño Non- dijo limpiándose una lágrima del ojo mientras continuaba riendo. Non se levantó de un salto de su asiento lo que me hizo tirar mi cuerpo hacia atrás.

Lucia realmente molesto, con el cuerpo ligeramente encorvado sobre la mensa y las manos sobre ella, Heng había herido el ego de Non.

Lo que faltaba una pelea entre estos idiotas por el amor de mi muñeca de porcelana. Regrese mi vista al libro para evitar golpear la cabeza de estos odiotas con el.

-¿Por qué lo dices? - espetó Non.

-Coqueteé el otro día con ella. Acéptalo, Non. Ella está fuera de tu alcance. - escuchaba cada detalle de la conversación de estos idiotas aunque aparentaba tener mi atención en el libro.

-Puedes coquetear todo lo que quieras con ella, Heng. - dijo Non encogiéndose de hombre. - Ella será mía. Seremos la pareja perfecta ella es tan hermosa y yo tan guapo, ¿te imaginas a nuestros hijos?

Te mataré, Non. Pensé pero mi vista seguía en el libro, mire de reojo a Nam que miraba expectante mi comportamiento. Heng río más fuerte.

-No lo entiendes, Non. Ella jamás saldría contigo- dijo Heng señalando a Non- ni conmigo - terminó y se encogió de hombros. Fruncí el ceño ¿a qué te refieres?

-¿Qué quiere decir? - preguntó Non volviendo a sentarse en la silla. Yo continuaba fingiendo leer. Sí, dinos a qué te refieres, Heng

-Bueno- comenzó Heng- cuando coqueteé con ella me dejó claro que las chicas guapas como ella solo salen con otras chicas guapas. ¿Lo entiendes Non? - dijo y yo sentí mi corazón correr un maratón.

Recordé el día que habíamos comido pizza en la cafetería. Las palabras de Heng retumbaron en mi cabeza "Quizás después podemos divertirnos como lo hacen las chicas guapas en Londres" Ese día pensé que Heng estaba coqueteando con Rebecca pero realmente le estaba diciendo que después saldrían como compitas a buscar chicas. Pestañeé varias veces asimilando la idea de Rebecca y Heng visitando bares por Bangkok en busca de chicas.

Alce mi vista y me encontré con los ojos de Nam que me sonreían y asentían. Vi a Non mirando la pared y soltando un suspiro de frustración.

Nam había ido a comer con Dew así que camine sola a los dormitorios, pensé en ir a ver a Rebecca para saber cómo seguía, para cuidarla como ella me había cuidado ayer, pero no éramos amigas, ¿cómo podía simplemente aparecer afuera de su habitación? ¿Cómo? Si a penas habíamos cruzados dos conversaciones.

Subí al elevador meditando en ir o no a la habitación de Rebecca.