POV FREEN
Estaba en la grada viendo la práctica de natación. El siguiente grupo saltaría al agua pronto, Becky estaba en el 4 carril. El profesor dio la señal y Nam, Oaey, Nat, Irin y Becky se sumergieron en el agua. Rápidamente Becky tomó la delantera, las había dejado atrás demasiado rápido, me levanté del asiento y mire el reloj en mi muñeca.
Cuando alcanzó los 50 metros dio un giro en el agua para impulsarse con las pies sobre el límite de la alberca miré mi reloj de nuevo. Al llegar a la orilla comprobé su tiempo, era bueno. Al parecer el profesor también lo notó porque hizo anotaciones en su hoja de trabajo.
Espere a que Becky saliera de las duchas para ir a la biblioteca, cuando salió aún tenía el cabello húmedo, llevaba un pantalón de mezclilla azul claro rasgado a la altura de las rodillas y una blusa negra de tirantes. Caminos a la biblioteca.
-Eres realmente buena - dije.
-¿En qué?- preguntó frunciendo el ceño.
-Tu tiempo en los 100 metros es destacable- dije - deberías integrarte al equipo de natación.
-¡Claro que no!- dijo Becky y la miré confundida- sé que soy buena - en cualquier persona hubiera soñado arrogante pero con ella no era otra cosa que la verdad - pero no tengo tiempo para estar compitiendo, ya lo he hecho antes y es agotador.
-¿Has competido? - pregunté.
-Sí, bueno mi padre desde siempre nos ha inscrito a mi hermano y a mi en cualquier clase que pudieras imaginar.
-¿cómo qué ? - pregunté, quería saber todo de ella, quería saber sus sueños cuando era una niña, sus miedos, sus anhelos. Éste solo es un pequeño paso pensé.
-No sé, de todo. - dijo pensativa- he tomado clases de natación, boxeo, fútbol, tiro con arco, esgrima, muay thai, golf, tenis. Sin contar clases de piano y danza.
La miré incrédula.
-¿cuántos años tienes? - pregunté alzando una ceja.
Rebecca me miró y río mientras movía la cabeza de izquierda a derecha mostrando sus hermosos diente blancos. Es hermosa.
-Te contaré un secreto - dijo deteniéndose, miró a nuestro alrededor y luego se acercó su cabeza al lado izquierdo de la mía. Tan cerca que podía oler el delicioso aroma a flores que desprendía su cabello, podía sentir su aliento sobre mi oreja, podía sentir el trote de mi corazón yendo de 0 a 100 en fracción de segundos - en Londres los días duran más que en Tailandia por eso nos da tiempo de hacer más cosas.
¿Ella realmente ha dicho eso o es que yo ya he perdido la cordura ante su perfección?
La miré y ella seguía sonriendo juguetonamente y yo entrecerré los ojos.
-¿Qué tanto más? - pregunté. Ella miró el cielo pensando su respuesta.
-Mmm 4 horas más, el tiempo suficiente para realizar otras actividades. - dijo asintiendo mientras reía y yo medité mi respuesta.
-Espero algún día poder realizar otras actividades contigo, Bec - dije con una voz ronca que no pude contener. La sonrisa de su rostro desapareció y pude notar sus mejillas sonrojarse. Mordí mi labio inferior instintivamente.
-La biblioteca... yo, tú. Quiero decir tenemos que hacer un ensayo- sus palabras salieron torpemente de su boca. No me dio tiempo de decir nada ella había comenzado a caminar o mejor dicho a correr de la misma manera en que lo había hecho ayer. Yo solo sonreí.
La irritabilidad corre fuerte por mi torrente sanguíneo, de repente apretó mi cíen tratando de ahuyentar la frustración. Cuento mentalmente mientras inhalo y exhalo lentamente.
La sensación de enfado no disminuye y sé que es porque tengo hambre. Estoy sentada frente a la Lap viendo tik-tok's, en ocasiones levantó la vista para ver a Rebecca ella está concentrada viendo su laptop con una pluma en la boca, la gira y la muerde. Frunce el ceño y se pasa las manos por el cabello, es tan jodidamente sexy.
Vuelvo mis ojos a la pantalla. Estoy harta llevamos más de 6 horas aquí, no hemos hablado casi nada. Rebecca es la descripción de intensa. El trabajo lo terminamos hace dos horas pero ella sigue perfeccionando la redacción, ortografía, y estilo del ensayo. Doy un suspiro.
Miró mi reloj, pronto serán las 8 de la noche y no hemos comido nada ¿cómo puede seguir sentada tratando de encontrar algo mal en el ensayo?
-Creo que es Perfecto, Rebecca -. Digo rompiendo el silencio pero ella no me mira- deberíamos ir a comer algo, llevamos aquí todo el día.
-Aún faltan algunos detalles, pero si tienes hambre puedes irte. - me dice volviendo a morder la pluma, ni siquiera me mira.
- ¿Tú no tienes hambre? - digo cerrando mi laptop emitiendo un suspiro.
-No, comí antes de venir- miente y miente horriblemente.
-¡¿En qué momento?!- mi voz sale en un tono más alto de lo que debería- desde que saliste de la práctica de deportes hemos estado aquí.
-Antes - dice con su vista en la pantalla- si te quieres ir adelante. Yo termino esto.
-Eres insoportable- digo llevando mi espalda al respaldo de la silla y cruzo mis brazos sobre mi pecho.
-No te estoy pidiendo que te quedes- dice levantó su cabeza mirándome y noto enfado en sus ojos- si tienes tanta hambre solo lárgate.
Maldita niña caprichosa. Insoportable. Pienso.
Trato de tranquilizarme un momento pero mientras noto como sus hermosos ojos marrones de abren como platos señalando hacia la puerta.
-Déjalo - digo tratando de relajar la situación- lo hemos revisado y es perfecto, no tienes que ser tan intensa.
Me mira y sé que la he cagado, aprieta la mandíbula y cierra de golpe su laptop, se lleva una mano al cabello haciéndolo volar hacia atrás.
-Seré todo lo intensa que quiera - habla lento pero su tono es de real enfado- sí tantas ganas tienes de comer, sólo vete. No te necesito para nada.
-¡Como quieras!
Ruedo mis ojos y me levanto, guardo mis cosas y salgo del cubículo dando un portazo.
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Líneas del destino. FreenBecky
FanfictionRebecca Patricia Armstrong abandona Londres tratando de olvidar su pasado reciente. Su padre la transfiere al colegio más importante en Bangkok, donde deberá aprender a lidiar con sus fantasmas y miedos. Sarocha Chankimha "Freen" nunca ha logrado es...