Prisión

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Kayn despertó ese día con un leve mareo. La brisa fresca que se colaba por su ventanal y la liviana luz del amanecer lo hicieron caer en cuenta de que habia vuelto al templo. Recordó el último contacto que tuvo con Rhaast, era extraño pero se podía definir como una especie de seguridad interna en dejarle el control de su cuerpo. Vaya por dios que nadie en sus cabales le permitiría a un "Dios demente" tomar el control de su cuerpo, pero en esos momentos Kayn no poseía muchas opciones.

Trató de encontrarlo en el mismo lugar donde anteriormente se había manifestado... pero no estaba. Cerró un poco sus ojos tratando de descifrar el por qué de su ausencia ¿Acaso se había agotado tanto como él? Imposible _ Debía estar en algún lado, pero por ahora prefería no encontrarlo.

Trató de recuperar sus recuerdos después de desfallecido, pero solo encontró un par de difusos recuerdos. Se lo encontré, en la tina, mirando sus manos. Luego saltó a otro recuerdo, él frente al espejo tocando su cuerpo. ¿Había hecho eso?

Volvió atrás nuevamente, confuso, y se vio entrando en el templo. Empujó a un par de guardias en la entrada, luego se detuvo subitamente en el pasillo principal, miró a los lados al parecer reconociendo el lugar... luego el arroyo, donde se vio tomando bocanadas de agua, ¿Que salvaje tomaba agua del arroyo ? Ya era suficientemente llamativo el cambio en su apariencia como para tambien comportarse como una bestia tomando agua de los caminos.

Parecia disgustado todo el tiempo conforme iba grabando, aun inmovil en su cama con la mirada perdida en la ventanal frunció el ceño. Empujó en su mente para ver la parte en que iba a dar el informe de la misión así como siempre lo hacia desde hace 3 años, era un requerimiento: presentar ante Zed y dar tu informe finalizada la misión.

Jamás pasó, después del arroyo todo lo que hay es él entrando en su habitación y de alli directo a la ducha. No queria volver a pasar por el recuerdo de lo sucedido en la tina ni el espejo asi que lo omitio.

Cerró sus ojos, tomó un respiro profundo del aire fresco que entró y de un impulso se puso de pie.

Localizó la Oz al lado de la puerta y caminando con mucha rabia abrió de una patada la entrada de su habitación. Al salir, emprendió carrera escalera abajo para llegar a la oficina principal de su maestro, estaba en graves problemas ahora.

Lo que no sabía era si la culpa ahora mismo era de Rhaast por no estudiar la parte importante de los recuerdos o él por ser débil y confiar en un maldito demonio. Sí... probablemente en la antigüedad hayan sido dioses, pero ésto era la actualidad y en este nuevo mundo ellos no eran más que demonios.

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Rhaast sintió como volvía a la vida del maldito vacío. Dedos frios sobre el mango de su Oz. Tomando un respiro profundo abrió su ojo, sintió a su "otra mitad" agitado y preocupado y molesto. Rhaast sonrió ante el reconocimiento de última emoción. Perfecto, la ira siempre era bienvenida. Mientras más ira sentia Kayn entonces mas debil estaría el muro.

Fortaleciendo su vínculo sintió como Kayn notaba su presencia. Se tensó ante ello.

En la morbida mente de Rhaast, pensó en empujar los recuerdos de la tina de la misma forma en que ayer empujó sus motivaciones antes de Kayn desfallecer. Pero esta vez fueron totalmente rechazados y devueltos a Rhaast de manera contundente, cuando éste reaccionó solo se encontró con él muro aún mas tenso frente a él. Y en el otro extremo, Kayn, quien le miraba de reojo disgustado.

CONSTELACIONES  [Kayn x Rhaast] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora