U n t o u c h a b l e | Gojo Satoru

⁴¹. Revenge

Un flash

Un mensaje.

Una foto llegando al teléfono de Naoya.

Mahito

Parece que resolví el misterio de porque no te contestaba

Es de ahora?

Si
Bajó de su auto, la vi atravesar la calle con aire de haber sido follada

El rubio hizo zoom en la foto, observando el bolso relleno, su cabello rizado y su piel morena viéndose más bronceada.

Unos pasos sonaron en la recepción, causando que él, en un reflejo, levantará la vista de inmediato.

–¡HEY!– la llamó furibundo, apresurando su paso hacia ella.

–¿Qué haces aquí? - preguntó con un tono desdeñoso, las cejas y nariz de la morena fruncidas, así cómo una mirada llena de fastidio.

–¿Qué mierda es esto?– dijo mostrándole la foto, el teléfono casi se estrella con su cara, causando que ella retrocediera.

–¿Qué te pasa?

–¡NO TE HAGAS LA PUTA IDIOTA!– gritó en el rostro de la morena, acercándose peligrosamente a ella, su dedo señalándola, buscando intimidarla –¿DÓNDE CARAJO ESTABAS? – preguntó.

–¡Quítate de encima! – la morena quiso quitarse la mano que la señalaba de encima, empujándolo, Naoya la tomó fuerte de la muñeca, torciéndola y causando un gemido de dolor en la chica.

–¡Oye, suéltame, Naoya!

–¿Estabas con él?

–¡NAOYA!

–¡ERES UNA PUTA!, ¡Apenas peleamos y vas corriendo con el idiota de Gojo! – el agarre de su mano se apretó.

–¡Detente!- chilló la morena. Ella jaloneo, sin poderse mover, sus ojos lagrimeaban debido al dolor físico, sus rodillas flaquearon, empezando a doblarse. –¡DÉJAME IR !

–¿Qué pasa aquí ?– preguntó un chico entrando a la recepción, el agarre de Naoya se suavizó y la morena se echó a correr escaleras arriba, podía escucharlo correr detrás de ella, cazándola.

–¡MEGUMI! – gritó la morena con toda su fuerza llegando a las escaleras que llevaban del segundo al tercer piso.

– ¡DÉJALA! – escuchó antes de  sentir el agarre de Naoya en su tobillo y caer en las escaleras de lado golpeándose las costillas logrando que el aire abandoné su cuerpo, un dolor punzante apareció, su frente  y labio también fueron golpeados con la esquina de las escaleras, su mente se nublaba, no podía pensar con claridad, su rostro comenzó a doler, ella sintió cómo Naoya la arrastró escaleras abajo, golpeando cada vez más sus costillas en cada escalón, el rostro asustado de Naoya al verle la cara, Alexa sintió como él se agachó sobre ella y la levantó, asustado.

–Mierda...Alexa... per...- susurró el rubio, ella no escuchó

–Mierda, la ha tirado. ¿Estás grabando esto?

– Sueltame.– susurro sin fuerzas.

– Llama a seguridad.

Su mente empezó a dar vueltas, empezando a escuchar borroso, cómo si estuviera sumergida en el agua, la morena escuchó unos pasos apresurados detrás de ella, unas manos se posaron sobre sus hombros y la apartó violentamente de Naoya. Satoru aterrizó un golpe en la cara de Naoya, lo tomó del cuello de la camisa y lo golpeó una segunda vez.