capitulo 19.

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Si de algo estoy segura, es que el examen no va a ser tan fácil como unos simples robots.

Yao-momo preparo una sesión de estudio en su "casa" entre comillas, porque todos sabemos que vive en una maldita mansión.

Y Bakugo sin razón aparente nos invito a mi y a Kirishima a estudiar a su casa, hasta que recordó que su madre lo molestaría toda la vida por que al fin trajo amigos.

- No se tienen que preocupar, podemos hacerlo en mi casa. - dije, sabía que en mi casa seria peor ya que mis hermanas eran un poco... Ellas, pero no quería sentirme presionada a ir a la de Yaoyorozu.

No digamos que tenga buenas experiencias en la casas de niños ricos.

- ¡¿En serio?!, digo... Por mi no hay problema. - dijo con algo de nerviosismo el chico pelirrojo.

- ¿Qué hay de ti, Bakugo? - pregunte, él solo giro la cabeza hacia otro lado y chasqueo la lengua.

- Tks, como sea. - ahora que lo pienso repite demasiado ese gesto cuando esta conmigo.

- ¡Está decidido, después de clases nos veremos! - dije con entusiasmo.

Desde el festival deportivo me he vuelto más tranquila (por no decir que ya agarre confianza).

Era una sensación que extrañamente... Me gustaba.

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- ¡Niñas, ya estoy en casa! - como siempre, escuche la vibración de las dos cada vez mas cerca junto a sus pasos, también el sonido de los dos chicos que solo expresa duda.

Y estoy más nerviosa de lo que pensaba.

La sonrisa de ambas se borra en cuanto notan a los dos detrás de mí.

- ¿Qué hace la rubia malhumorada aquí? - dijo Alice, con un tomillo de diversión y molestia.

- Alice. - dije en modo de regaño, escuche como Bakugo se estaba empezando a molestar - A la rubia ya la conoces, él es Eijiro Kirishima, son mis... - me costo decirlo, pero me di cuenta de que era así - Amigos, estudiaremos.

Ambas asintieron sin más, y yo me encargue de presentarlas.

- Eijiro, ellas son Alice y Arise, mis hermanas. Ya que nos presentamos, ¿Procedemos? - los dos asintieron, ambas se fueron a sus cuartos y se encerraron, claramente no estaban acostumbradas a las visitas.

Subimos las escaleras y entramos a mi cuarto y cerré la puerta, los tres nos pusimos en mi escritorio y empezamos.

Explicaba con detalle, mientras que Bakugo cada vez que Eijiro se equivocaba lo golpeaba en la cabeza. Cosa que trataba de detener pero era inútil. Con el pasar del tiempo fuimos ayudándonos mutuamente en cada materia. En el caso de Kirishima lo que se le dificultaba era inglés, y en eso le ayude.

- Bakugo, solo concéntrate en dejar de gritar y golpearlo por no saber algo, carajo, vas a despertar a las niñas.

- ¿Y como sabes que están dormidas? - me preguntó Kirishima.

- No te entra lo de que tengo un buen oído, ¿No? - le dije en un tono de ironía.

Y así continuamos todo el resto de la tarde, con gritos de Bakugo que terminaron como golpes para él.

- Las niñas. Están. Dormidas. Katsuki. - le dijo, le jale la oreja y por fin cerró la boca.

Y lo admito, fue una tarde divertida.

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Y el día del examen escrito llegó, y como siempre estaba preparada.

Si, después de que Bakugo y Kirishima se fueran, seguí estudiando.

«Un Amor Nacido Entre Rivales» Katsuki Bakugo x OC.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora