C XLVII

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GIOVANNIE

-Bueno ustedes también tienen la culpa, están hablando de temas excedidos en un lugar no apto- reprendió Eli- Mejor ya vámonos, ya hay niños que quieren subir a los columpios y mi suegra nos espera.

-¡No! Aún hay tiempo- refunfuñó mi novia.

-Además nosotros llegamos primero a los columpios. Ellos que se esperen- le siguió Bay.

-Chicas por favor, mañana pasamos de nuevo. Ahora ya debemos irnos- trato de convencerlas Eli

-Está bien- dijeron las dos e hicieron un puchero.

La verdad yo estoy como ellas, aun no me quería bajar de los columpios, los habíamos ganado.

El camino del parque a la casa fue muy relajante platicamos de todo lo que se nos ocurría. Empiezo a creer que no somos tan serios como nos han dicho.

***   ***

-¿Ustedes que tienen en la cabeza? Como se les ocurre hablar sobre algo así en un parque para infantes.

-Perdone suegra, pero era una plática entre nosotros 4, la señora que escucho y se ofendió. Nadie le dijo que nos escuchara- se excuso Amy y empezamos a reír.

Mi novia no siempre es lo que se ve.

-¿Que clase de respuesta es esa?- habló mamá- En primer lugar ustedes estuvieron mal al platicar sobre algo de carácter sexual en un lugar infantil, así que la señora estaba en su derecho- sentenció mamí.

-¿Pero a tal punto de llamarnos hijos del pecado? La señora se excedió, como si su hijo lo hubieran engendrado por arte de magia- contraataco Bay.

-Hay no. Mejor apresúrense a terminar sus deberes, para salir a pasear- aviso mamá y continuamos con lo nuestro.

Él primero en terminar fue Eli ya que no era mucho y salió a arreglarse, Bay termino pero se quedó recogiendo el tiradero que teníamos Amy y yo de materiales.

-Gracias pequeña. Ve cambiarte, en un rato acabamos nosotros-agradecí por la acción.

-Denme sus chaquetas del uniforme, paso a dejarlas al cuarto de lavado- se las entregue y se marchó.

-No se que harás el día en que Bay se case, es una extraordinaria hermana- hablo Amy.

-No lo sé, creo que me volveré loco- confesé- Creo que no estoy preparado todavía.

-Lo se, pero para eso estaré yo. Te daré ánimos- me tomo de la mano y la abrace.

-Lo se princesa- la tome por sus mejillas y la bese. 

Dios, que bien se siente probar sus labios una y otra y otra vez, un sabor totalmente exquisito y adictivo.

-Ya vi que ya terminaron sus deberes, ahora vayan a cambiarse antes de que les aviente agua jóvenes hormonales- escuchamos a mamá bromear y nos separamos.

-Nos dirá esas palabras por un buen tiempo- se burló mi niña y nos separamos- Vamos arreglarnos- recogimos lo último que había y subimos a nuestros cuartos.

****

-¿Qué hacemos aquí?- preguntó Amy.

-Hija pensé que de su relación tú eras la lista.

Auch, golpe bajo.

- Es la empresa de los padre de Elián.

-¡No puede ser! ¡Estamos en la constructora MontArch! Ay Dios mio, alguien sosténgame. Siento que me voy desmayar- grité con emoción y todos los que estaban ahí me miraron raro.

MIRA AL CIELO| Siempre Será Nuestra PromesaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora