capitulo 22

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Estaba fuera de la oficina de Umbridge, que me había dejado una nota pidiéndome ir.

En ese momento Harry salió de la oficina ví que ocultó su mano y yo solo me rei.

—Haber tu mano niño

—No tengo nada profesora.

Alce la ceja y el apenado me mostró, y Vi lo que la vieja esa le había echo, la sangre me ardió aunque no sabía muy bien por qué, solo que se me hacía sumamente molesto.

—Retirate.

El asintió y entre a la oficina, ella tenía una tacita de té y me sonrió.

—Fudge tienen un mensaje para usted Nisha.

—No me interesa escuchar un mensaje que seguro será para amenazarme o retirarme de Hogwart.- en ese momento saque mi varita, rodee el escritorio y lo puse en su cuello.- pero el ministerio de magia ¿Sabe que usted estaba de lado de mi padre asquerosa cerdita?

Ella soltó su taza de té que se cayó encima de la ropa y vi como se puso pálida en ese momento.

—Yo no..

—No está hablando con cualquiera, dígame señora antes de cualquier oración por qué yo soy hija del gran Voldemort y si a mí se me da la gana la saco y la mato a las afueras de hogwarts y créame que nadie se va a lamentar de su muerte.

Ella estaba temblando y asintió.

—Si señora.

—Yo tengo las pruebas suficientes, para acusarla con el ministerio de magia, y creanme como están las cosas, no dudarán en sacar a una exseguidora de Voldemort.

Ella asintió, ví las lágrimas en sus ojos, tome la pluma y se la puse en su mano, son quitar la varita de su cuello.

—Escriba para mi, soy una cerda.

Ella asintió y vi como empezaba a llorar mientras que en su mano salía la escritura de soy una cerda.

—Le diré a mi padre cuando sea momento, que no la mate, que como mascota me va a ser muy útil.

Tire una carcajada y salí de su oficina, odiaba a las hipócritas como esa, al menos yo nunca he dicho que era buena persona.

    [...]

—Umbridge fue nombrada suma inquisidora de Hogwarts, es obvio que Fudge tiene miedo que tomes su puesto ¿O no Albus?

El se rió mientras acomodaba el juego de ajedrez y asintió.

—Pero por lo visto a ti teme Umbridge, ¿Qué le hiciste?

—Solo lo necesario.

Se metía a cada clase a preguntarle las cosas a maestros, menos a la mía, la mía me había puesto una alta evaluación en idiomas.

—Severus, un gusto tenerte aquí.

Mire y estaba en la entrada de la oficina de Albus.

—Esta sacando a la profesora Trelawney de Hogwarts la arpía esa.

Vi como Albus se levantó enfurecido, iba a salir tras de el cuando Severus me tomo del brazo.

—¿Cuánto más me vas a evitar?

—No te evito, solo no me interesas.

—¿Ah no?

Se acercó a mis labios y empecé a respirar más lento.

—Besame, por favor.

El sonrió y asintio, para darme un beso tan seductor, tan cautivador que mis piernas temblaron por lo tanto que lo desearon.

Dangerous Woman // Severus SnapeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora