Jack
Mi cabeza pesaba algo, pero no tanto, no tenía resaca, pero me sentía cansado, mire mi teléfono, era la una de la tarde. Me bañe, alistándome, al bajar no había nadie, le escribí a Gemma, pero no respondió.
Recuerdo fragmentos de lo qué pasó anoche y que vergüenza, ver cómo Aida me sacaba de la fiesta ebrio. Dios fui un estúpido al abrazarla así y pedirle que se quedara, ¿que pensabas Jack? Que te sobaría el cabello hasta que te quedarás dormido o que te abrazaría igual, ridículo.
Aunque uno ebrio hace y dice lo que desea en el fondo, por eso yo no me embriago, es terriblemente agotador luego.
—¿Donde están los demás? —llegue al último piso del edificio y encontré a Gemma, jugando billar.
—No lo sé, ¿sabes jugar? —asentí y me uní al juego.
Jugamos una partida y me aburrí.
—¿Sabes apostar, de casualidad, Jack? —.se puso al otro lado de la barra de licores y se sirvió uno.
Dios cómo puede tomar desde ya.
—¿Te refieres a juegos de mesas? —asiente —un poco, crecí jugando juegos de mesa, mi hermanita no podía jugar algo diferente y yo siempre fui fan antes de que ella naciera. Son divertidos cuando los dominas.
—¿En serio? ¡Genial! —acabó su bebida de un solo —,iremos a jugar a un casino.
—¿Por que?, no vinimos aquí solo por vacaciones, no es así? —Gemma parecía la más sincera con todo.
—Correcto —no dijo más nada.
—¿Que planearon?, ¿Cual es su intención verdadera del viaje repentino?
—No es repentino, fue planeado, tú fuiste el que llegó de sorpresa —se giró cruzada de brazos —deberías pedirle explicaciones a Aida, no quiero problemas, ya sabes cómo es.
—En realidad no se cómo es y ella tampoco es como que me muestre alguna parte de ella —tome mi teléfono, escribiéndole a mi mamá.
La sala quedó en un silencio, pensé que se iría.
—Debes tener paciencia, Aida no es como las otras chicas con las que has salido, lo sabes —recalcó.
—Ninguna es igual a la anterior. Lo que me refiero es que ella no hace nada y yo parezco ser un perro el cual la sigue a todos lados, esperando a que le tiren una croqueta —me levanté de la silla y salí de la habitación.
Esa era la verdad por más estúpida que sonara. No se por que debía seguir aquí, no se que me pasa. Desde que llegó Aida mis decisiones y mi vida por completo se han visto afectadas en todos los aspectos de la palabra. Ha alterado todo en mi alrededor que no puedo diferenciar y eso que solo ha sido un corto tiempo, eso es lo peor. No se en que momento se metió así.
—Ahí estás —hablando de ella, pase a su lado sin mirarla —¿a donde vas? —no respondí, baje el ascensor.
Tal vez sea grosero, pero ella... ella está exprimiéndome justo como lo dijo. Aunque es cierto que me mostró su peor forma, la más real y que a veces es amable y linda conmigo, haciéndome querer quedarme. Tal vez ese sea el problema, alguna forma de manipulación.
ESTÁS LEYENDO
Pecado culposo
Storie d'amoreSiempre fueron polos opuestos, se dice que los polos opuestos se atraen entre sí, justo como un imán. Jack quien es un "alma pura" se terminara encontrando con Aida, quien le dará un gran giro a su vida, cambiándolo en el proceso y defectuosamente a...