Joy..
Hace tres dias volví a la casa de Atlas, me subió el sueldo y puso una cocinera, nada mal teniendo en cuenta que no estoy tan familiarizada con la cocina fit que pretende comer todos los dias mi jefe.
Hoy es sábado y no debo trabajar, voy a prender a las trillizas, quiero interiorizarme con un par de cosas ademas de investigar un poco a mi jefe para saber a que atenerme.
Hace unos dias pienso en mi amigo lo extraño tanto, desde ése dia no supe mas de él… Ojalá tuviera su nueva identidad para por lo menos mantener contacto, hacetres años no lo veo.
Como es de noche a Iker ya lo dejé durmiendo, el padre teoricamente esta en la misma mision que su hijo asique yo tengo tiempo para mi misma… o para indagar.
Ya tengo todo ordenado y escribo lo que quiero saber, ¿Como murió la mamá de Iker? Aunque ahora me da un poco de duda, estaría violando la intimidad de una familia que no es la mia y la cuál el padre me odia pero me sigue teniendo en su casa por que su hijo me adora.
Salgo de mis pensamientos al sentir el golpe de las ollas en la cocina, ¡Un intruso! Miro a mi alrededor en busca de un arma de defensa, aunque con mis manos puedo reducirlo.
Me pongo en pie, abro la puerta lo mas silenciosa posible y me encamino enfundada en mi pijama de stick corto, camino de puntas por el pasillo que da a la cocina, al llegar hay ollas tiradas en el piso y la luz apagada.
—Mierda…— que voz sexy…
Veo una sombra inmensa acercandose a la heladera por lo que me acerco rapiramente hacerle la maniobra apretandole el cuello, pero justo se da la vuelta chocandome.
—¡Aaaah!—gritamos los dos y del susto caigo sobre mis pobres nalgas que ahora me duelen.
—Joy… ¿Que haces?— de golpe la luz es prendida y me encuentro con un torso bronceado e inflado deliciosamente muy cerca mio— ¿Estas bien? Me sorprendiste.
Y ahí reacciono, me pongo de pié con su ayuda y veo que estaba sirviendose tarta de ricota que habia hecho por la tarde a pedido de Iker, el me dijo que esa abominación no tocaria sus labios… valla sorpresa.
—Asique no te gustaba mi abominación— veo el momento en el que un leve sonrojo cubre su pecho llegando a sus pomulos marcados, ¿Quien diria que esta mole se sonroja?
—¿Yo dije eso?—pregunta con cara de inocencia.
—Esa cara haciéndote el inocente no me conmueve, tus palabras exactas fueron “Jamas probaria esa abominacion de carbohidratos vacios, además no es para nada rico” al parecer alguien mentía—suelta una de sus risas encantadoras donde llegan a sus ojos y lentamente se va acercando a mí, por mi parte no me acobardo.
De golpe se agachó llevandome con él, hasta que siento una superficie fria, por la sorpresa grité bajito, ¡por dios!… el olor de su piel es magnífico, me sentó en la isla de la cocina, veo que abre un cajon y saca una cuchara.
—Mi voz no suena así, ¿Te gusta la tarta de ricota Joy?— pareciera que ronronea con mi nombre en su boca, es como si disfrutara o le diera placer el solo hecho de nombrarme, trato de que mi voz no tiemble al responderle.
—Obviamente es un intento de imitación. Me encanta, aprendí a cocinar con mi mamá, se hacer distintas también— ¿Hay un animal acá? Sentí un gruñido.
—Un intento muy adorable. Me recuerda a la que hace la abuela Estela, magnificas manos para la cocina dulce y salada, ¿Cual es tu comida favorita Joy?— ¿Pueden los ojos oscurecerse? Por que me da la sensación que los de él están un poco más oscuro.
¿Por que le interesan mis gustos o cosas personales? Si se supone que me detesta, no le creo la disculpa que me dio pero volví por el niño por que aunque parezca mentira lo adore apenas me habló, despertó una debilidad en mí que me asombró.
—Mmm mi comida favorita no es una sola tengo muchas, pero sin duda la que encabeza la lista son las Hamburguesas con salchipapas de mamá, son para chuparse los dedos—Veo los gestos que hace y como traga duramente, ¿Que le ocurre?
—Creí que eras de las chicas que les gusta la cocina mas sana—su voz es unas octavas mas gruesa y ronca. levanto una ceja por que me parece una broma su comentario.
—Jajajaj es broma ¿No?— niega con una sonrisa en esos labios llenos, no puedo dejar de admirarlos, pero me obligo a subir mi mirada hasta sus ojos— Mirame, no tengo el tipo de cuerpo que se cuida y pasa desapercibido.
—Créeme que te miro todo el tiempo debo decir que eres adorable— suelto una carcajada por la locura de su comentario, adorable es lo que menos soy.
—Para nada lo soy, siempre atraia la mirada de los chicos pero no de buena manera— tomo una bocanada de aire por que esta parte de mi vida siempre fue dura.
—¿Te molestaban?— pregunta con cierta furia contenida que no estoy entendiendo nada.
—Sufrí mucho maltrato, en esa época mamá me enseñó a defenderme— me río del recuerdo, a varios niños dejé llorando.
Comienza a darme pedacitos de tarta con la cuchara mientras putea a diestra y siniestra.
—Mocosos de mierda, ¿Los padres hicieron algo?— veo que se está molestando realmente por lo que e pasado y eso que no tiene la historia completa, voy a cambiar de tema.
—¿Que paso con la mamá de Iker?— veo que se tensa y no lo pensé lo dije en voz alta, cierro los ojos por mi torpeza, al abrirlos veo dolor y rabia en su mirada— Yo y mi torpeza, lo siento tanto no me di cuenta que lo dije en voz alta, no respondas es una pregunta personal que no debo entrometerme, lo siento.
Quiero bajarme de la isla pero me aprisiona mas con su cuerpo colocando las manos a ambos lados mios apoyadas en la encimera, lo que hace a continuación me deja sin palabras… me abraza y esconde su cara en mi cuello, la vulnerabilidad que desprende me achicharra el corazón.
—La mataron, los mataron— dice escondido y no entiendo a qué se refiere— no estoy listo para hablarlo pronto lo haré.
Lo consuelo abrazandolo, al sentir mis brazos a su alrededor me abraza mas fuerte. Adoro la sensación de sus fuertes brazos rodeando mi cuerpo.
—Me encanta tu perfume— pasa la nariz por mi cuello haciendo estragos, agarra mis piernas y las pone alrededor de su cintura, me sostiene del culo y cuando va a querer besarme llega un alerta.
“Alerta Joy”
Salvada por las trillizas.. Aprovecho su confusión para bajarme de sus brazos y correr para la habitación, esta alerta solo quiere decir una cosa..
Un intruso.
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El sueño de Atlas (#3 S. Amores Tercos)
RomanceAtlas es un jugador estrella de Rugby, es el chico adorado de los fanaticos de dicho deporte. lo que nadie sabe es que puertas adentro de su casa, él es padre soltero cerrado al amor por cosas pasadas por lo que su vida se centra en su profesion y...