La verdad sale a la luz (parte 2)

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-...Elena y Raquel- dijo Pepe.

Valeria pensaba que aquello no podía estar pasando. Ya eran dos veces las que había perdido a gente que le importaba y no le parecía justo que sus dos amigas se marcharan y Raúl se saliera con la suya.

Tras bajar a abrazar a los dos chicas, estas aún seguían llorando y de nada servía que Pepe les dijera que aún quedaba la repesca para que alguna pudiera volver y a pesar de que Jordi le lanzó una mirada de consuelo a Valeria, esta decidió no hacerle caso.

Al volver a la casa, Kat y Valeria se ofrecieron a ayudar a las dos chicas a recoger sus cosas.

-A mí no hace falte, ya hay alguien que me va a ayudar- señaló Elena.

Sus tres amigas se la quedaron mirando muy extrañadas, pues aquella no era la primera vez que la chica decía que alguien misterioso iba a ayudarla.

-Es una putada que Raúl siga aquí- confesó Kat sin poder contenerse.

-Es verdad- corroboró Valeria-. A este paso él acabará siendo el ganador del programa.

De repente, Raquel dejó de hacer la maleta para observar a ambas chicas.

-Y una mierda- dijo-. Antes prefiero comer insectos fritos a permitir que pase eso. Si no puedo ganar el concurso prefiero que alguna de las dos lo consiga.

Ni Kat ni Valeria habían visto a Raquel tan enfadada por lo que prefirieron no interrumpirla.

-¡Estoy total y absolutamente convencida de que una de las dos se llevará el premio porque sois la ostia!- gritó a pleno pulmón.

En ese momento, las tres se quedaron en silencio para luego estallar a carcajadas y echarse a llorar a la vez.

-No sabía que tenías tan mala leche, tía- dijo Kat.

-Ni yo tampoco- contestó la propia Raquel.

-¿Os parece bien si vamos a buscar a Elena para consolarla?- preguntó Valeria cuando se separaron.

En cuanto estuvieron a punto de llamar a la puerta de la habitación de su cuarta amiga, escucharon ruidos muy raros como de algo golpeando a la pared, por lo que muy preocupadas, dejaron la educación a un lado y abrieron la puerta encontrando una situación de lo más incómoda y es que Elena estaba en la cama con... Hugo.

-Hola, chicas- saludaron los dos intentando taparse lo máximo posible.

-Veníamos a ver si necesitabas que te consolaran- susurró Valeria con la cara sonrojada.

-Pues como podéis comprobar, ya me están consolando bastante- contestó Elena con timidez.

-Bueno...os dejaremos solos- sentenció Kat antes de cerrar la puerta.

Ninguna de las tres chicas se alejó de la puerta y aún con la cara desencajada, volvieron a la habitación.

-Ahora sabemos porque Elena llegaba tarde a algunas de las clases- expuso Raquel aún sin creerse lo que acababa de ver.

Por la tarde, Raquel y Elena se despidieron de sus amigos no sin antes desearles mucha suerte y que volverían a verse en la repesca.

Y lo cierto es que la experiencia que estaba viviendo Valeria iba a traerle alguna que otra sorpresa más.

¡A la orden, chef!- #PGP2023 [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora