Por Joselo Rangel
Wednesday, March 26, 2014
(Segunda y última parte)
-¿Ya viste lo que pasó con Cometa? Lograron encontrar lo que les hacía falta: una buena canción. No deja de sonar en Reactor, seguramente el Imperial se va a poner hasta la madre ahora que toquen.
-¿Canción?¿Cuál canción?
Hacía tiempo que Yenia no escuchaba Reactor. Desde que se había salido Julio Martínez, el locutor que mejor le caía y que consideraba más inteligente, no la ponía. Así que no estaba al corriente de qué música estaban pasando.
Pues resulta que Cometa (eso le contó a grandes rasgos el Chamuco) había logrado colocar una canción dentro de la programación. Desde la primera vez que Rulo la puso en su programa los twits habían llovido de lo lindo. Los Cometa se habían convertido en famosos de la noche a la mañana. Yenia ya no escuchó qué más le decía el Chamuco. Estaba pensando en la canción que ahora programaban en el radio. ¿Sería la suya?
Así que al otro día dejó conectada su compu a esa estación. La espera fue larga, pues la rola no aparecía. Al menos durante toda la mañana no la programaron. Además la señal por internet era muy mala, tenía que conectarse una y otra vez. Fue hasta el programa de la tarde, en que el Golfo presentó a Cometa, y aunque en realidad no dijo nada sobre la banda o la canción, daba la impresión de que ya era un grupo consagrado, que siempre habían estado ahí y que nunca se irían. La presentación dio paso a la música. Y sí. Era su canción.
Yenia no sabía que hacer, así que hizo lo primero que se le ocurrió, mandarle miles de whatsaps al Topo que se palomearon como leídos pero no respondió ninguno. Sabía que no debería llamarle pero lo hizo. Nada tampoco ¿Se estaría escondiendo? Aún así siguió marcando hasta que contestó una voz de mujer que decía "bueno, bueno" mientras Yenia guardaba silencio. Mejor decidió caerle al soundcheck para verlo, encontrarse con él en vivo. El Topo le había dicho que su novia nunca iba a verlo tocar, así que no había bronca. Tenía que hablar con él, platicar sobre su canción, ¿qué plan tendría el Topo?, ¿cómo la incluiría en los créditos de composición? Si bien sabía todo sobre derechos de autor en textos, libros y reportajes publicados en revistas, respecto a canciones no tenía ni idea. Tendrían que hablar sobre eso. No creía que el Topo le hubiera robado su canción,¿o sí? Había ido a su depto a enseñársela ya grabada, habían estado juntos escuchando el demo, ese mismo que ahora sonaba en la radio. No era una buena grabación, pero funcionaba. Muchas de las rolas que sonaban en esa estación eran lo-fi, algunos grupos hasta buscaban ese sonido mal hecho, pagaban miles de dólares para que su rola sonara como si de un demo se tratara. Así que la canción de Cometa no desentonaba con las demás.
Cuando llegó al soundcheck, afuera del Imperial había dos chavas fumando. Seguramente novias de algunos integrantes de Cometa. Yenia reconocía a su especie a kilómetros de distancia. No sabía decir bien por qué, pero algo en su actitud prepotente y en la forma en que miraban a los demás, las delataba. Yenia se metió al antro sintiendo las miradas de estas dos. El Imperial estaba desierto, muy distinto a como lo solía ver ella de noche. El grupo estaba allá arriba, en el escenario, sin tocar, esperando a que arreglaran algún desperfecto en la batería. Cuando el Topo la vio, dejó su bajo recargado en el ampli y saltó para saludarla. Todos los miraban, estaban en medio del lugar, así que el Topo la llevó hacía un lado, más cerca de la entrada.
Después de los saludos de rigor Yenia no se pudo aguantar más
-¿Que mi canción está sonando mucho?