Diferentes Continentes

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Sara

- ¡Mueve tu trasero Sara porque te quedas! -

Carol estaba apurada para irnos. Hoy comenzaban nuestras vacaciones de verano. Tres semanas de descanso. Ella estaba apurada porque Max llegaba a la ciudad hoy, en cambio yo,  llevaba seis meses sin ver a Patrick, que no me dijo que regresaba, aunque guardaba la esperanza de que llegara hoy, al igual que Max y quisiera sorprenderme.

- Ya... Baja la ansiedad, estaba cerrando mi maleta. Ya podemos irnos. -

Aparecí en la sala del departamento lista para irnos. Volvíamos a la ciudad. Carol y Roxy iban a casa de sus padres, pero yo no. Me llevaba muy mal últimamente con Felipe, mi padre, así que estas tres semanas de vacaciones de verano, las pasaría en casa de mi Tío Manuel, hermano de mi padre, -aunque estaban alejados,- y mi tía Alicia. Los dos eran dos personas buenísimas, y me trataban como a su hija. Ellos tenían dos hijos, Santiago, un año menor que yo , y Francisco, él era menor que yo por un año y medio, así que éramos muy unidos. Mis primos eran los mejores del mundo. Éramos más como hermanos.

- Escucha linda, pasaremos por ti a las ocho en punto, debes estar lista. Veré a Max después de casi 6 meses, así que si te demoras cinco minutos, te dejo aquí. -

Me despedía de Caro, que nos trajo de regreso porque tenía automóvil.

Roxy reía porque decía que estaba desesperada. Por la noche, había fiesta de vacaciones, en la casa de uno de los amigos de Carol, Alex. Lo conocí en la universidad. Era un chico algo serio, muy atractivo, todas querían salir con él, y él salía con todas... pero era muy buen amigo, se notaba a lo lejos, y cuando estaba en confianza, era más que divertido.

- Seremos las solteras codiciadas Saruchi... ¡así que arréglate porque saldremos a romper corazones! -

Roxy me saludaba desde el automóvil con una sonrisa algo resignada, porque estaba en la misma situación que yo. Había comenzado una relación con Steve, que era soldadito al igual que Patrick, así que también esperaba por él.

- No sé si codiciadas o patéticas, pero con estilo, amiga... ¡siempre divinas! -

Me despedí con la mano de las dos que reían a carcajadas desde adentro del automóvil. Ésta noche, en esa fiesta, estarían todos. Incluída la idiota de la ex de Patrick, que estudiaba derecho con los demás, así que estaba dispuesta a verme mejor que nunca. 

Mis tíos me recibieron como siempre con muchísimo cariño. Adoraba llegar a su casa, me sentía muy amada aquí, ellos me hacían sentir no solamente cómoda, sino que me amaban como a una hija más, pero no solo eran así conmigo, con mis hermanas también.

- Santiago llegará en cualquier momento. Nosotros volveremos a Barcelona por Francisco, así que espero que tú y tu primo cuiden la casa, y no hagan fiestas, y si las hacen, no se excedan! -

Estaba merendando con mis tíos y me reía de las recomendaciones de mi tía Alicia. Santiago era súper responsable, estudiaba un tipo de ingeniería, la cual yo olvidaba normalmente. Él estaba en La Universidad de Stanford, así que vendría desde California. Francisco estaba en Barcelona, haciendo su último año de preparatoria, al igual que mi hermana Kelly. 

Como la empresa principal de Manuel estaba allí y sus nuevas sucursales aquí, él viajaba constantemente. Mi tía lo acompañaba a veces, porque se quedaba con Francisco, pero una vez que mi primo terminara sus estudios en Barcelona, todos se iban a asentar aquí, porque el iría a estudiar a Cambridge.

- Saruchi... tu madre llamó. Estarán aquí el domingo. Sabes que tendrás que ir a ver a tu padre, ¿no? Yo no puedo interceder en eso. Mi hermano es algo... intransigente, por así decirlo.-

Olvidé RespirarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora