Paciencia

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Sara:

- Que haces aquí??!!! -

Había ido a atender la puerta mientras hablaba con Patrick, esperaba por Santiago, pero cuando abrí no era él... Era Marcus y se veía extraño, porque traía gorra y gafas de sol, apenas si alzó la cabeza para mirarme...

- Tú no deberías estar aquí, lo siento... -

Me dijo casi susurrando, pero no me dio tiempo ni a pensar, porque dio un paso adelante y me lanzo un golpe muy fuerte en el rostro... Sé escapó un grito del dolor, pero la violencia del golpe, me arrojo hacia atrás, y al golpear mi cabeza en el suelo, me desmayé.

Me desperté con un fuerte dolor en mi cabeza y en mi rostro, era casi insoportable... estaba sentada contra una pared, mis brazos estaban atados a mi espada y mis piernas atadas de una manera tan fuerte que dolía... no entendía nada... mi vista estaba borrosa, veía algo borroso, estaba en una habitación en penumbras, se filtraba poca luz...

- Carol?... ¿Roxy? ¿Qué sucedo donde estamos? -

Pregunte por qué más allá vi una mujer, pensé que era una de mis amigas

- SSH habla bajo, si gritas o hablas fuerte van a golpearnos... mi nombre es Betty, se llevaron a tus amigas, seguramente a que las revisen y las traerán después -

La chica me habló sin alzar su vista, el cabello le cubría el rostro, estaba maniatada de la misma manera que yo

La chica me habló sin alzar su vista, el cabello le cubría el rostro, estaba maniatada de la misma manera que yo

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- ¿Betty? ¿Quién eres tú? ¿Qué hacemos aquí? No entiendo nada ... Donde está Roxy y Carol? -

Comencé a sentir miedo, muchísimo miedo

- Me llamo Linda... Betty y yo somos estudiantes de psicología, tampoco sabemos qué hacemos aquí... fuimos a una cena con unos amigos, y al parecer nos drogaron o algo, porque despertamos aquí... llevamos dos días ya... Cuando llegamos había dos chicas más, pero vinieron unos hombres, las revisaron tocándolas de una manera asquerosa, y se las llevaron... después las trajeron a ustedes... es todo lo que sabemos -

Giré mi cabeza a mi izquierda al escuchar otra voz, era otra chica, tan joven como yo, quizás hasta de la misma edad, su rostro estaba tan golpeado como el mío, y hablaba entre lágrimas. Comencé a querer desatarme, forcejeaba con mis ataduras, pero eran imposibles, estaban demasiado apretadas, me lastimaban la piel

- Debemos salir de aquí... ¿Qué es esto? No entiendo ... Por Dios, esto es una locura -

Forcejeaba sintiendo que mi piel se estaba lastimando, pero no me importaba, solo quería salir de aquí

- No podrás soltarte, ya lo intentamos. Tampoco sabemos que es esto, pero al parecer o lo que nosotras pensamos, que más que un secuestro, es una venta de mujeres... porque esa gente que vino, eligió a esas chicas y se las llevó, les inyectaron algo y las sacaron cargando de aquí... Como verás, la ventana está casi llegando al techo, no hay salida, solo vienen dos hombres cada dos horas y te llevan a un baño, debes hacer tus necesidades frente a ellos, nos dan de comer una vez al día, ahí desatarán tus manos, pero se quedan vigilándonos mientras comemos, luego volverán a atarte -

Olvidé RespirarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora