Sol & Luna [ Muichiro X Kotetsu ]

Charla

No tenia idea de como se supone que funcionaba esto.

Muichiro estaba en el patio de la finca mariposa, intentando averiguar como se supone que se usaba la técnica de sangre, se supone que debía tener una pero no sabia que hacer o como seria. Había comprobado que no podía usar las respiraciones , parecía ser un rechazo automático de su nueva forma, a si que la única opción de ataque ahora era sus poderes, los cuales aun no sabia usar. 

La herida que se provoco para intentar ver si su sangre reaccionaba con algo se cerro lentamente , pero no hubo nada. Las horas pasaron y cuando el cielo empezaba a cambiar de color, el joven decidió entrar de nuevo, suspirando  ante otra noche en vano intentando activar su técnica de sangre, subió a su habitación , la cual estaba prácticamente sellada, más que nada para mantener el lugar a oscuras durante el día.

Un suave golpeteo en la ventana lo hizo acercarse, una parte de la ventana aun podía abrirse a si que por ahí entro su cuervo - Bienvenida, Ginko - sonrió suavemente y cerro la ventana a la par que su ave se posaba en su hombro - gracias por ir hasta la villa para dejarle la carta a Kotetsu - Tomo el sobre y fue a sentarse en su futón -¿Él está bien?

-....diría que parecía agobiado.... tal vez haya mencionado algo de eso - Ginko bajo y se acomodo en las piernas de su dueño y Mucihiro abrió la carta para poder leerla mientras acariciaba el plumaje de la ave.

Estas semanas las había sentido tan extrañas... tal vez simplemente se acostumbro a la presencia de Kotetsu a su lado, y ahora, tenerlo lejos le resultaba extraño, pero era asombroso como solo ver su colgante de luna lo tranquilizaba, le daba una sensación alegre de alguna forma. Aun no terminaba de entender sus propios sentimientos, pero tal vez le haría caso a Mitsuri... Por un momento pensó en dedicar la carta a eso, pero algo le decía que era mejor hablarlo en persona, a si que tendría que esperar un poco.

Ginko parecía estar adormecida por las caricias sobre su cuerpo, las cuales solo se detuvieron cuando su dueño termino de leer la carta, obviamente no enviaría una respuesta pronto, no quería sobre exigir así a su cuervo , suponía que  tal vez una carta a la semana estaría bien, dejo a su mensajera descansar en su futón mientras el buscaba donde resguardar la carta. 

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El sol salió, anunciando la llegada de un nuevo día.  

Kotetsu despertó con dolor en su cuello, hizo una mueca antes de encogerse donde estaba y sobo el área lastimada antes de enderezarse , bostezo y sintió su estomago rugir, recordó que no ceno nada además de algunas frutas cuando le sirvió a Ginko. Hizo una mueca pero se quedó quieto algunos minutos mientras analizaba se supone que debía hacer.

Estaba por volver a quedarse dormido cuando el sonido de la puerta le indico que tenía que levantarse , tallo sus ojos y se acerco a la ventana para ver quien estaba afuera tan temprano, sus sentidos despertaron de golpe al ver a Senjuro y Genya , retrocedió y se apresuro a vestirse. 

Mientras tanto, abajo, Kanamori abrió la puerta , sorprendiéndose de ver a los otros dos chicos ahí a esas horas- Oh, Joven Rengoku, joven Shinazugawa ¿qué los trae por a qui tan temprano? 

-Queríamos hablar con Kotetsu ¿Está en casa? 

-Si, pero sigue dormido... Solo vine a hacerle el desayuno antes de volver al taller