🔘APARIENCIA DE AMOR

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Elliot

Si hubiera sabido que esto sería así, no abría aceptado la idea de Taylor, cuando dijo que teníamos que desaparecer. Nunca mencio que tendríamos que vivir de esta manera, o que tendría que disfrazarme de mujer. Pero aquí estaba frente al espejo vestido con un uniforme de sirvienta y con una peluca pelirroja. El plan de Taylor era infiltrarse en la casa de Elena para sacar a su hija de ese lugar, el único problema es que yo tenía que hacerlo ya que el con sus músculos se vería muy brusco y daría algo de miedo con esos músculos que tiene. Aunque debo decir que usar falda es algo liberador ya que hay más ventilación, y viendome bien no estoy tan mal.

Cuando llego a la sala Taylor está sentado en uno de los sillones que venían con la renta del lugar, al verme empezó a chiflar  y a reírse, y casi se cae cuando empecé a practicar mi papel de mujer enfrente de él. Claro que él esto le parecía divertido ya que no se tuvo que depilar todo y cuando digo todo es todo, como siempre  digo si vas a hacer algo tienes que interpretar el papel por completo.

Sin decir nada salgo de ese cuarto de vecindad y voy a la parada de autobuses, me siento un poco extraño en especial cuando los niños me observan con cara de confusión o cuando los señores de la construcción me chiflan, casi persigo a uno de ellos cuando me dio una nalgada, pero me contuve ya que correr con tacones no es algo que dominará aún.

Por suerte había tenido suerte ya que el camión no estaba lleno, así que no sería manoseado, cosa que no me sorprendería si alguien lo intentará ya que este uniforme que consiguió Taylor es algo corto y revelador para una chica recatada como yo.

Durante el camino veía por la venta, pensaba en Christian en como estaría era mi hermano y lo quería, y aunque se negara a admitirlo sabía que estaba enamorado de Ana, al igual que yo de Kate, apesar de todo.

Al llegar a la casa de esa bruja, empecé a caminar contoneando la cadera, debía obtener el trabajo y sacar a Sofía de ese lugar. Una chica en biquini me habrio la puerta y me invitó a pasar, adentro había más chicas vestidas de esa manera y algunos cuántos sujetos, parecía que tenían una fiesta o algo así. Seguí caminando atrás de la chica que me habrio, tocó una puerta y me indico que pasara, al entrar un señor estaba sentado atrás de un escritorio, el tipo fijo su vista en mi y solo dijo: Desvistete.