¿Más que sólo mejores amigos?

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Todos estos años juntos con su lindo novio le había provocado miles de emociones, provocándole tomar una de las decisiones más importantes de su vida y ahí estaba, de rodillas frente a Lionel Messi perplejo ante la sorpresa que su novio le había preparado aumentando más su culpa.

Pasaban los minutos y un suspiro largo fue lo primero que salió de sus labios — Te he estado engañando con Cristiano desde hace cuatro meses, Guille — y todos en aquel tour se quedaron en silencio al mismo tiempo que escuchaban el corazón del chico rizado romperse en miles de pedazos — Por eso no quería venir a España, no lo merezco.... — y el mexicano solo bajo la mirada mientras se levantaba. Tenía sus mejillas sonrojadas por la pena que sentía y sus ojos cargaban sus lágrimas contenidas provocando que el trayecto de regreso al Hotel fuera muy incómodo para ambos.

Messi deseaba explicarle todo y conociendo a su novio, este cedería a sus ideas. Era un hombre realmente especial, manipulable, mimoso, cariñoso, fiel y claro que lo amaba pero le era difícil terminar con el fugaz romance que tenía — Podemos estar los tres juntos, Cristiano está de acuerdo... en una relación poliamorosa — y Ochoa le dio la espalda por completo al escuchar esas palabras.

— Chaparrito... ¿Puedes dejarme solo por algunas horas? Puedes irte a donde quieras y con quién desees... solo necesito un tiempo para meditar— Pero Lionel insistiría tanto que acabaría por primera vez con la paciencia del mexicano que se giró para hablar con en voz alta — ¿Qué parte no entiendes, Lionel? No quiero verte ahora, así que lárgate por unas horas — su voz gruesa provocó en el argentino estragos dentro suyo y obedeció sin rechistar.

Maldecía el momento en que hizo público la propuesta, en estos momentos era tendencia mundial en las redes sociales y recibía miles de mensajes por parte de sus conocidos para saber el chisme hasta que un viejo amigo, le marco — Lo siento, Memo — dijo en un susurró.

— No te preocupes, estaré bien solo que... no sé qué hacer ahora. — respondió triste.

— ¿Te gustaría venir conmigo? Podemos pasar unos días juntos y ponernos al día, te ayudará mucho a calmarte y estar alejado de... él —

Ochoa lo meditó unos segundos hasta que sonrió un poco para animarse — Bien, buscare un vuelo y te avisaré — respondió Ochoa y agradecía de corazón, que su viejo amigo estuviera realmente pendiente de él a pesar de ignorar la mayoría de sus mensajes o cortarlo de forma fría para darle todo su atención a Lionel Messi.

Aprovecharía este viaje para pedirle disculpas.

Messi llegó dos horas después y al entrar a la habitación, vio a Guillermo arreglado y con su maleta en mano — ¿A... donde vas? — preguntó inquieto.

— Después de pensarlo... he decidido terminar nuestra relación Lionel. Sabes perfectamente que respeto las nuevas ideologías o tipos de relaciones que nacen por la actualización del mundo, pero no significa que yo, Guillermo Ochoa vaya a vivirlo en carne propia, sabes perfectamente que tengo la mente muy abierta, por algo soy pansexual pero estar en ese tipo de relación.... Mejor rechazo tu propuesta y te dejo vivir a tu manera, no quiero saber cómo inició tu infidelidad ni muchos menos los motivos que te conllevó a hacerlo.... Me hubiera gustado que te acercaras para hablar de nuestra relación así que mucha suerte en tu vida Lionel... Me largó y en estos momentos nada me hará cambiar de opinión — explicó Guillermo y camino hasta la puerta — Toma como regalo de despedida el resto del viaje, no me importa si lo concluyes con Ronaldo... es una señal para decirte que quiero que terminemos de una forma sana... adiós — Y Messi se quedó solo en la habitación, procesando todo lo que acababa de suceder.

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Ochoa estaba en la cafetería del aeropuerto en espera de su amigo, le había avisando que llegaría algo tarde para terminar con unos pendientes y tomarse algunas semanas de vacaciones aprovechando su visita — ¡Hey Memo! — al escuchar su voz, giró hacia el locutor para encontrarse con Manuel Neuer sonriente y Ochoa se levantó de la mesa para recibirlo con un fuerte abrazo — Lo siento, tenía varios pendientes por finalizar.... — dijo apenado el alemán.

Pequeños cortos Mechoa y demás shipsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora