Nuestro Verano

Capitulo 9: Cena y sentimientos

Por primera vez estaba conociendo el departamento de Pedri, era muy bonito, tenían que alistarse para la noche de celebración y el no había podido sacar ropa, así que Pedri le presto algo, aunque todo le quedaba algo grande, espero al mayor acostado en su cama.

– Ojitos bonitos, creo que vamos a llegar tarde – aviso el mayor, Gavi levantó la mirada y se sonrojo al instante, Pedri solo llevaba una toalla en la cintura.

– Yo... iré al baño – dijo rápidamente mientras salía de la habitación, Pedri era consciente de que era un adolescente hormonal, estuvo buen rato tratando de calmarse hasta que escucho los pasos de Pedri.

–Venga ojitos bonitos, ya tenemos que irnos – se lavo la cara por última vez y abrió la puerta.– Ya estoy Pedrito.
Salieron de la casa, pero antes de que pasaran a casa de Ferran habían quedado en ir juntos, Gavi estaba discutiendo con Ferran por la canción que iban a poner.

– Pon la de Eladio y grabamos un tiktok – Gavi rodó los ojos y le dio un golpe.

– Mejor ponemos una de Taylor – dijo el menor, los dos empezaron a pelear otra vez.

– Basta ya los dos, yo voy a colocar la música y se callan – Ferran le dio una mala mirada al menor y le sacó la lengua.

–Que infantil Ferrari – se burló Gavi, Pedri nego al ver como se estaban comportando los dos, le gustaba que se llevaran bien, en su antigua relación Ferran odiaba a su novia, siempre le había dado malas vibras y Ferran siempre había tenido razón.

– ¡Si tú supieras que por ti me muero, que yo te quiero, te quiero, te quiero, te quiero!– grito Ferran, Gavi lo miro y le dio una sonrisa cómplice.

–¡Si tú supieras lo que te he esperado, que yo te amo, te amo, te amo, te amo!– cantó el menor mirando a Pedri, vio que Ferran sacó su teléfono y empezó a grabar.

–¡Y me dijeron que te vieron sola ,¿Por qué estás sola?,suelta el pasado y déjame ser el que te enamora!– respondió Pedri, las mejillas del menor se volvieron completamente rojas, quién diría que el capullo engreído estaría a su lado cantando canciones de amor.

–¡Baila conmigo ahora, y olvida a los demás, soy tuyo, haz de mí lo que tú quieras, ah, ah, tengo los sentimientos en regla, ah, ah, que ha sido tan larga la espera, ah, ah, que por fin estás soltera, ah– grito Ferran desde atrás, solo quería molestar a Pedri y cumplió lo que quería cuando Pedri le dio una mala mirada.

–¡Y le tiro una mirada y me da game over, y así no puedo, me entrego y le digo you can be my lover, le suelto el freno!

–¡Cuando tú me miras, yo te miro y me muero, nadie te quiero como yo te quiero, nadie te ve como te puedo ver, eh, eh– Pedri miró a Gavi y este sonrió, se había dado cuenta de que las sensaciones en su estómago eran las famosas mariposas, nunca le había pasado, pero Pedri le había hecho sentir muchas cosas en tan poco tiempo.

–¡Y por fin se encontraron, no, no, no– cantó Ferran cambiando la letra de la canción, Gavi en estos momentos se declaraba el mayor fan de Ferran, Pedri soltaba varias risas al escuchar a Ferran cantar, ni siquiera con Sira cantaba así, aunque últimamente su relación no iba muy bien.

–¡Dime que ese soy yo, el que ves a tu lado, que cuando estoy cerca olvidas el pasado, y yo lo puedo ver, dime qué vas a hacer, yo te quiero tener!– Pedri canto, sabía lo que causaba en el menor, también sabía que el pequeño niñato había roto aquella barrera que se había puesto para evitar el amor, un niñato lo había enamorado, Pablo merecía un premio, la canción siguió y los tres cantaron hasta el final.

– Me caes muy bien chaval – dijo Ferran dirigiéndose al menor, desde que Pablo llego a la vida de Pedri, este sonreía mal, aunque al inicio le pareció una locura, sabía que Pedri era un poco idiota y el pequeño Gavi recién tenía 16, no quería que le hiciera daño.