Me sentía muy nervioso, había ido a comprar algunas cosas con Pablo y después lo había dejado en su habitación. Pablo no se quería separar de mí, fue muy difícil dejarlo.
Hoy era el clásico y hoy era él día que Pablo se iba, quería que su despedida fuera muy especial, que la recuerde cada vez que piense en mí, no estaba listo para dejarlo ir, pero si quería que el cumpliera sus sueños era necesario dejarlo ir.
Había preparado esto desde que me dijo que se iba hoy, la fecha coincidió con el clásico, Mateo había sido el encargado de llevarle una entrada con una carta, todo empezaba desde el partido.
Había hablado con los chicos sobre las asistencias, hoy necesitaba hacer un gol, necesitaba dedicarle ese gol, sería el último gol en donde estaría Pablo.
Todos sabían que hoy los chicos se iban y regresaban después de tiempo. Ferran estaba en automático, aunque lo negará se notaba que no estar con Oliver estaba afectando.
Salí de los vestidores, el partido iba a empezar en unos minutos. Cuando todos estaban en la cancha me limite a buscar a mi ojitos bonitos con la mirada.
-Pedri - la voz de Araujo me desconcentro.
-¿Qué pasa? - pregunté mirándolo.
-Allá arriba - señaló en las gradas que estaban por las bancas - Con todo Pedri, este partido es tuyo.
Asentí y dirigí mi mirada hacía las gradas. Pablo llevaba mi camisa, una gorra del equipo y en su hermoso rostro estaba dibujado un ocho, sonreí con orgullo, mi ojitos bonitos estaba aquí, después de mucho tiempo.
El sonido del silbato dio inicio al partido, la gente estaba muy eufórica, el primer gol lo hizo Lewandowski y todos corrimos a celebrar. Debe admitir que ese gol hizo que nos confiaramos mucho, no esperamos que Carvajal metiera un gol dejándolos en empate al finalizar el primer tiempo.
Me sentía decepcionado, no podía dejar que ganarán, me había prometido ganar este partido por Pablo.
- Venga Pedri Potter el segundo tiempo es nuestro - ánimo Frenkie.
El segundo tiempo dio inicio y los gritos de la gente era cada vez más fuertes, Lewandowski y Joao me estaban dando pases, pero el jodido arquero no dejaba que la pelota entre.
La gente empezó a gritar cuando Ferran le robó el balón a Valverde, Ferran empezó a correr con fuerza y cuando estuvo cerca del arco lanzo la pelota con todas sus fuerzas haciendo que este caiga en mis pies, lo domine muy bien y cuando vi que todos estaban corriendo detrás de mi, con todas mis fuerzas lancé la pelota y entró, por fin entró.
Corrí a celebrar con todos los del equipo, le di las gracias a Ferran por el pase y lo abracé. La gente se levantó a aplaudir y a gritar mi nombre con alegría.
Vi cómo todos se alejaban y mire hacia las gradas. Lo vi gritando, estaba muy emocionado, Pablo me estaba viendo, después de dos años Pablo estaba aquí, le dedique ese gol porque él es y siempre será el dueño de esos goles. Pablo es el amor de mi vida desde siempre, desde ese día de verano en el que lo conocí, desde ese primer beso, desde esa primera mirada, desde nuestra primera cita, Pablo es el amor de mi vida, quien diría que el niñato ebrio me iba a enamorar de esta manera. Pablo es mi todo, con Pablo quiero todo.
Pablo es la persona que amo con todo mi ser, porque desde que lo conocí mi corazón solo late por él, Pablo altera todo mi ser, Pablo es mi felicidad, esos ojitos son los más hermosos que he visto, Pablo me enamoró con su forma de ser y a pesar de todos lo problemas nuestro amor es más fuerte.
El partido llegó a su fin, habíamos ganado dos a uno, la gente seguía gritando eufóricamente. Vi como se metía entre todas las personas y bajaba hacia la cancha, se vía jodidamente guapo usando mi dorsal.
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Nuestro Verano
Romance«Bebé los dos sabemos que es verano Y que tal vez Cuando termine agosto no nos volvemos a ver»