Tú mi sol y yo tu luna.

Tú mi sol y yo tu luna/ Cap III

Los personajes no me pertenecen
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                          Capitulo III

-Hoy te darán de alta- Valentina se sentó a un lado de Lu en la camilla para estar mas cerca de su esposa- Podremos cuidarte en casa- le dedico una tierna sonrisa a Lu
-¿En casa? ¿con mis padres?- Valentina no supo como responder, no se habia puesto a pensar en eso. Ahora tenia que explicarle, que cuando se refería a casa, era su casa, donde vivían las dos desde hace mucho tiempo, su hogar.
-Lu...nosotras- se acomodo un poco mas cerca de su esposa para mirarla directamente a esos ojos chocolates que siempre la hipnotizan- Nosotras vivimos juntas-
-!¿Qué nosotras qué?!- Lu se puso de mil colores y miro a Duda que las observaba divertida, solo ella podia reírse de una situación así.
- Hace mucho tiempo, decidimos vivir juntas Lu- miraba con preocupación cada gesto de Luíza, queria asegurarse de que nada malo iba a ocurrir con su esposa al ir recibiendo ese tipo de noticias-
- Quiero ir a casa Valentina- dijo de golpe Luíza- Con mis padres y hermanas-
A Valentina se le rompió el corazón al escuchar la petición de Lu, pero debía aceptar lo que ella necesitaba en esos momentos, y Lu queria ir con sus Padres...
- Bien, como tú quieras mi Lu- le susurro las ultimas palabras conteniendo sus ganas de llorar.
Luego de un par de horas mas, otra visita del doctor y el neurólogo, Luíza salia junto a sus padres rumbo a su casa, Duda y Valentina iban unos pasos mas atrás observando cada movimiento de Lu.

-Val, dale un poco de tiempo- Duda sabia que su cuñada estaba triste por no poder llevarse a su esposa a casa- Ya verás como querrá irse a casa contigo, solo dejemos que asimile la información de que vive con la Bomba sexy de Valentina Albuquerque- Valentina la miro sorprendida y ruborizada
-¿Que dices? ¿que es eso de bomba sexy? ¿por qué dices eso?-

-Date cuenta cuñada- Val la miraba confundida, Duda giro los ojos en blanco- Ella esta con la mente en la facultad, cuando te admiraba desde lejos y pasaba discutiendo contigo, eras como una especie de amor imposible para ella, y resulta que de golpe vive contigo y no sabe como sucedió eso-
-Nunca fui imposible para ella, siempre estuve tratando de llamar su atención-
-Ahora solo ten paciencia y luego intenta volver a llamar su atención- le guiño un ojo a su amiga- no será dificil, ella te ama, solo que no lo sabe por el accidente-
-Espero tengas razón Duda, quiero a mi Lu de regreso, pero debo ser paciente, y ayudarla en su recuperación-
-Valentina, hija- la madre de Luíza se giro para hablarle a la chica- ¿Vendrás con nosotros cierto?-
¿Por qué mi mamá le habla de esa forma tan familiar y cariñosa a Valentina? ¿Que esta sucediendo?
- Mamá, Valentina tendrá cosas que hacer, debe estar cansada- trato de decirle a la mujer mayor que solo le dio como respuesta una sonrisa
- Si, por supuesto- Respondio Val totalmente convencida, ella no se alejaría de  su Lu por nada del mundo.
-Bueno, yo me retiro, debo ir con mi pequeña, Igor se pone nervioso estando mucho rato solo, cree que la puede romper-
-Amiga, gracias- se abrazaron Lu y Duda- te quiero-
- Y yo a ti amiga, oye- le hablo bajito a su amiga- aprovecha que la tendrás cerquita- le pincho las costillas-
-¡Callate!- Le dio un pequeño golpe en el brazo- te va a escuchar-
Duda solo reía, la verdad es que habia algo divertido en la situación, claro esta dejando de lado todo el accidente, pero ver a Lu nerviosa por Valentina como lo estaba en la facultad, la convence de que ella sigue completamente enamorada de la chica de ojos claros sin siquiera saber que esa mujer se convirtió en su esposa.

-No quiero perderme el momento cuando Lu se entere de que es casada- se decia para si misma, viendo como la familia se iba alejando en el vehículo- ni mas ni menos que con su Valentina-

Luíza ingresaba a lo que era su antigua habitación en la casa de sus padres, estaba su cama, pero habian cambios ahí, no se sentía como si fuera suya. Recorrió el lugar con la mirada, algunos recuerdos se le vinieron a la mente, cuando se preparaba para ir a estudiar. Su antigua cómoda en el mismo sitio, su espejo de cuerpo completo.
Cerca de su cama su atrapasueños seguía en la cabecera, una foto en un pequeño cuadro donde estaba ella con Carol y su pequeña hermana Sara.
-Te llevaste la mayoria de tus cosas, cuando te fuiste a vivir con Valentina- su madre apareció en el lugar abrazándola desde atrás.
-¿Donde estan mis hermanas?- preguntaba mientras miraba aquella fotografia.
- Ellas se fueron de vacaciones con sus novios, ya vienen viajando de vuelta, a Carol casi le da un ataque cuando les avisamos de tu accidente, pero les dije que se lo tomaran con calma, que ya estabas mejor-
-¿Novios?- Se sorprendió- Mamá, Sara es una niña pequeña-
- Hija, Sara tiene 18 años- Lu se mareo con la información
-Mi hermanita...mi pequeña Sarita tiene...¿18?- se sentó en la cama, y se llevo las manos hacia su cabeza- creo que es mucho para mi, necesito...necesito estar sola- Sus manos comenzaron a sudar- porfavor mamá, déjame un momento a solas-
-Esta bien- dijo no muy segura de retirarse- te prepararé algo de comer- la chica asintió- Estaremos abajo por si necesitas algo, lo que sea hija-
La mujer bajaba por las escaleras y se encontro con Valentina que estaba atenta a que su suegra bajara.
-¿Que sucede?-
-Se sorprendió mucho al saber que su hermana tiene 18 años- ambas mujeres se sentaron a los pies de la escalera- me pidio que la dejara sola, no se si hice lo correcto-
-¿Crees que sirva de algo si subo a verla?-
- No lo se, pero eres tú quien ella quisiera que estuviese a su lado, nadie mas que tú- ambas se miraron- ¿ Que crees que haría ella en tu situación?-
- Mi Lu no me dejaría sola aunque yo me molestara con ella- sonrió- subire, de alguna forma estare a su lado aunque me tire el bolso por la cabeza-
-Ve con ella, prepararé algo de comer-

Se encontraba frente a la puerta de la antigua habitación de Luíza, aquella chica que se transformo en el amor de su vida desde que la vio, se encontraba del otro lado  y Valentina moria por abrazarla y decirle que todo iba a pasar.

Nerviosa y con la ansiedad a flor de piel, se atrevió a dar unos pequeños toques en la puerta, dos golpes para ser exactos, una costumbre que tenia Valentina, mas de dos era exagerado.
Esos dos toques fueron los que provocaron en Lu un pequeño saltito, de alguna manera sabia quien estaba al otro lado de la puerta.
-¿Valentina?- su inconciente sabia reconocer esos dos toques, y la chica mencionada desde el otro lado quedo sin saber si moverse o no- ¿Eres tú?-
- Eh, si...soy yo- le recordó a las primeras veces que intento acercarse a Lu en la facultad, donde las mariposas se desordenaban en su interior
-¿Puedo...puedo pasar?-  un silencio que parecía eterno, no habia respuesta desde el otro lado, y Valentina estaba demasiado nerviosa.

- Si- fue todo lo que necesitaba para poder ingresar.
Tantos recuerdos en aquel dormitorio, Valentina recordaba cada uno de los momentos que vivió en ese lugar, los besos de Lu cuando ya eran algo mas que amigas, las veces que la acorraló contra la pared y Val reía de felicidad.
-¿Te puedo hacer compañia?- cerro con suavidad la puerta tras ella.
-Si- Luíza se sentía nerviosa con la presencia de Valentina en su habitación, era nuevo para ella el tenerla ahí, tan a solas.
-¿te puedo decir algo?- la chica se acerco a la cama sentándose cerca de Luíza
-Dime, porfavor- era imposible para ella no perderse en los labios de Val, eran tan atrayentes, se veían tan suaves-
- No es primera vez que estoy aquí...en tu antigua habitación- la miro directamente a los ojos chocolate- contigo a solas-
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Eve🍀