Tú mi sol y yo tu luna/Cap XVI

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Los personajes no me pertenecen.
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                           Capitulo XVI

Valentina se encontraba sobre la cama, esparciendo crema sobre su cuerpo como cada noche, mientras Luíza ocupaba el baño. No se percato de la presencia de Lu en la puerta del baño, observando los movimientos de sus manos por sobre su piel bronceada mientras se pasaba la crema.
- Eres una mujer demasiado sexy- Valentina miro hacia donde estaba Luíza al escuchar su voz y se quedo mirándola con la boca abierta.
Luíza se encontraba de pie, con un bello y delicado Babydoll de encaje rosado.
A Valentina se le olvido como respirar en el momento en que sus ojos verdes se posaron sobre el tonificado cuerpo de Luíza.

- Tengo una debilidad por tu piel bronceada- Luíza caminaba en dirección a su silenciosa esposa que en ese momento era su presa -Cada uno de los lunares sobre tu piel me llaman a besarlos- Se acerco a la cama y de rodillas avanzo lentamente mordiendo sus labios, miraba a Val con hambre - No se como lo haces Valentina, pero siempre tengo deseos de tocarte- Acaricio lentamente una de las piernas de Valentina desde la rodilla hasta llegar al short de dormir que estaba utilizando Val.

- Luíza- Pronuncio el nombre de su esposa con una voz ronca, sus ojos se perdían en ese maravilloso cuerpo que tenia frente a ella- Te ves condenadamente sexy- Luíza levanto una ceja.
- Hoy quise verme sexy para mi mujer- puso una de sus manos sobre el hombro de Valentina y la empujo sutilmente hacia atrás para que se acostara sobre la cama.

- ¿Quieres matarme?- sus ojos poco mostraban de ese verde que le encantaba a Lu, estos se encontraban completamente dilatados reflejando su deseo.
- A besos tal vez- se acomodo sobre las caderas de Valentina a horcajadas - Quiero que disfrutes-
- Siempre disfruto cariño- se lamia sus labios, de pronto comenzó a sentir mucha sed, pero solo Lu podria calmar esa sensación - Deseo saciar mi sed de ti-
- Vamos despacio vida- se inclino para besar esos carnosos labios de su esposa. Valentina aprovecho ese beso para colocar una de sus manos en el cabello de Lu, así poder alargar un poco mas el ansiado beso - Si sigues besándome así, voy a acabar muy rapido- Le dijo como advertencia.
- No esta mas lejos de mi objetivo- ingreso su lengua en lo mas profundo de la boca de Lu, robándole un delicioso gemido.
- Eres peligrosa Valentina- dejo una mordida un poco mas fuerte en los labios de Val, el cual fue dolorosamente excitante para la chica de ojos verdes.
- A ti te fascina tenerme así- Unieron su manos entrelazando sus dedos.
-¿Así como?- Lu comenzó a moverse sobre el cuerpo de Valentina.
- Así, encendida, excitada...húmeda-
- Me encanta tenerte así, me vuelves loca Valentina- Luíza beso el cuello de Val, para continuar su recorrido por su hombro y clavícula.
Acariciaba con su lengua húmeda,disfrutaba del sabor de su piel. Besaba esos lunares.

Con sus manos desabrochaba los botones del pijama que tenia puesto Valentina, y poco a poco dejaba al descubierto los pechos de su esposa.
- Amo cada rincon de tu cuerpo- con sus dedos tocaba los lunares de Valentina, quien respiraba pesadamente - Dicen que los lunares son los lugares donde mas fuimos besados en una vida pasada- dejo una mordida mientras bajaba por entre los senos de Valentina - Me gustaria pensar que fui yo quien te beso en otra vida, así como me gusta besarte en esta-
-Lu- la llamo, y ella conecto su mirada con Valentina, entendiendo la petición- ven- Luíza volvió en su recorrido y se acomodo sobre el cuerpo de su esposa, para perderse en un deseado beso. Ese roce de sus labios, era intenso, ninguna queria cortar aquel beso. Sus lenguas se acariciaban, calientes y húmedas. Se dedicaban pequeñas mordidas intencionales buscando encender aun mas a la otra.

-Soy adicta a tus besos- Valentina hablaba entre el beso- al sabor de tus labios- pasaba sutilmente su lengua por el labio de Lu quien se mantenía perdida en Valentina con los ojos cerrados- la suavidad de tu lengua- recorría el cuerpo de Luiza con sus manos. Lu movía sus caderas lentamente manteniendo una de sus piernas entre las de Valentina, provocando un roce delicioso con la intimidad de Val - Pierdo la cordura cuando te mueves así-

Tú mi sol y yo tu luna.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora