el verano en que amé. (Conrad Fisher y tú)

capitulo 5.

T/N'S POV

A la mañana me levanté y recordé la conversación que tuve con Conrad anoche, se sintió bien, pero lo arruinamos como siempre, baje a la cocina aun media dormida y en el camino me tope a belly que estaba igual que yo, juro por dios que vi a Susannah, o eso creí hasta que se dio vuelta y era Julia, volví a la realidad en cuanto Skyler llamó la atención de su madre que estaba rebalsando el jarro con agua.

—Tu también pensaste en Susannah, ¿cierto?—me susurró belly.

—Es escalofriante—susurré.

—Mierda—dijo la señora mientras cerraba la llave.

—No estamos en california pero ahorra un poco de agua.

No tengo memorias de haber conocido a Skyler, pero se veía normal.

—Gracias cariño.

Al menos la bruja era agradable con alguien.

—Belly vámonos de aquí.

La chica asintió y nos dimos media vuelta para irnos pero Skyler nos llamó.

—Hola chicas.

Ambas volteamos avergonzadas.

—Hola Skyler—saludé.

—Lo sentimos—siguió la Conklin menor—. He olido los muffins.

—¿Quieren uno?—ofreció.

—Claro.

—No gracias—sonreí—. Es muy pesado para mi.

—Esos son para la muestra de la casa, buenos días—interrumpió Julia.

—¿Alguien ha traído muffins?—llego Jeremiah.

—Hola, Jeremiah.

—Hola—respondió al saludo de sky.

—Conrad—saludo al otro primo.

Ambos venían de la playa.

—Skye—respondió—. No me dijiste que ella estaba aquí.

—En realidad soy no binario, dios, han pasado diez años desde la última vez que nos vimos. ¿Cómo están desde lo de su...?

—Ha sido duro—respondió el Fisher menor.

—Y mas ahora que nos roban la casa—siguió Conrad.

—No he robado nada. Te guste o no yo decido que hacer con esta casa y he decidido venderla, deberían ir partiendo para no atascarse en el tráfico camino a Boston.

—Ni hablar, nos quedaremos a la muestra de la casa—respondió Conrad.

—No, no quiero a un grupo de adolescentes asustando a los posibles compradores, llama a tu padre porque este no es un problema de la tía Julia.

—Sí que lo es, porque tu eres el problema.

Demonios Conrad, eres muy terco.

—No tengo tiempo para esto.

Skye se vio triste con la situación, después de todo eran familia.

—Conrad—le hablé—. Ella aun sigue siendo tu familia.

—¿Y por qué nos hace esto?—preguntó.

—Es duro para ella.

Ambos volteamos a ver a Skye.

—¿Lo es?—preguntó—. Parece que es muy fácil.

—Conrad es suficiente—reproché.

El se fue y salí tras el, deje a los chicos en la cocina.