¿Pensaron que a Conrad le iría mal y que fallaría el examen? Pues no, fue uno de las mejores notas dentro de su clase y tal como prometimos, ahora tengo un anillo en mi dedo y alguien a quien llamar "prometido" es genial.
—¡No puedo creer que no estuve ahí para ver esa propuesta!—chilló Belly a través del teléfono.
—Primero; ouch, segundo; estás a más de mil kilómetros de aquí, no hubieran podido llegar ni aunque lo intentaran y tercero; aunque sabía que venía, no sabía cuando.
—Al menos dime cómo fue.
—Vale, el día del examen Conrad no me hablo después del examen, y no apareció hasta el fin de semana, yo pensaba que no pasaría nada, y estaba un poco confundida por eso, en fin, nos fuimos a comer, estuvimos un rato tonteando con el postre y me llevo a una caminata por la playa, desearía que pudieras haber visto la luna desde el mar, sacamos fotos y grabé un poco, me volteé a grabarlo a él y estaba arrodillado con el anillo en su mano.
—¿Y QUE PREGUNTÓ? ¿FUE LINDO? ¡Cuéntame más!
Aleje el teléfono de mi oído y mire a Conrad buscando su aprobación para poder decir esa parte, y me la dio. Su discurso se había vuelto mi cosa favorita para escuchar, podría escucharlo mil veces y nunca cansarme.
—El dijo, "me has visto crecer, pasar por un millón de etapas, buenas y malas, te he alejado y te he dañado, sin embargo nunca me has dejado solo, incluso cuando lo merecía, te he visto crecer y surgir, convertirte en una mujer increíble, llena de amor y de alegría, desde que cada verano en la casa de mamá, lo único que anhelaba era que tú llegaras entendí lo que era el amor, esperar por ti e intentar que tuvieras buenos momentos, me arrepentiré por siempre de los malos, pero sé que eran necesarios para mejorar y entender que siempre ibas a ser tu, es por eso que aquí, es que te pido que seamos siempre los dos, juntos hasta que nuestra existencia se acabe. Mi mejor amiga, mi novia y mi amor, ¿Me harías el honor de dejarme convertirme en un esposo digno de ti? No hay otra persona con la que desearía estar el resto de mis días.
Escuché a Belly sollozar desde el otro lado del teléfono. Conrad se reía un poco.
—Eso fue hermoso, lo hizo bien.
—Lo fue, creo que llore demasiado en el momento, Conrad es increíble.
—¡Ha dejado la vara muy alta! ¡Muy alta! Top diez de cosas lindas.
—¿O-Para quien?—pregunté—. Yo no quiero a nadie más si no es el, su existencia es vital en la mía, y sí, es mi top de cosas favoritas.
—¡Mensa! Ha dejado la vara alta para cuando Jeremiah quiera casarse conmigo.
—Oh, entiendo, descuida Isabel, cada propuesta es diferente, depende de la persona, pero sé que será igual de fenomenal.
—¡Más le vale! Porque de lo contrario le diré que no y no me sentiré mal al respecto.
Me reí y noté como Conrad lo hacía también.
—Descuida bells, si mi hermano no hace una propuesta épica, aceptaré que le digas que no.
—Muy bien, chicos debo irme pero los llamaré pronto, adiós.
—Adiós Belly—nos despedimos.
Desde que habíamos dado la noticia, mi madre fue la más feliz, amaba a Conrad y desde ella se pasó hasta Laurel y su familia, Conrad le dijo a su padre y quedamos en que apenas pudiéramos iríamos a ver a su madre.
—¿Crees que ella esté celebrando?
Me volteé a mirarlo.
—Ella era de nuestro team, estoy segura que nos dio el empujón para que llegáramos a esto, así que no solo creo que esté celebrando, debe estar planeando todo con ayuda de más ángeles, seguramente nos dará señales cuando sea necesario.
—Me gusta pensar que ella estuvo viendo todo, y que ella fue la que me dio la fuerza para pedírtelo en un lugar público.
—Lo sé, fue muy especial que lo hayas hecho sabiendo que eres un poco tímido con gente extraña.
—Tú lo valías, así que no me importo en ese momento hacerlo así, solo quería verte sonreír.
—Lograste tu cometido, me hiciste muy feliz, me haces muy feliz.
—Es algo mutuo, tú me haces muy feliz a mi.
—¿Incluso en aquellos veranos en los que hacía mi misión de vida molestarte cada vez que podía? Era muy pesada cuando niña.
—Esa guerra era mutua, pero esos veranos en secreto eran mis favoritos.
—¿Lo eran?—pregunté—. Aún recuerdo un verano, creo que teníamos como siete u ocho, y que el último día habíamos discutido por no sé qué y me moleste tanto contigo que corte pétalos de rosas y los arroje en el pasillo para que tú madre te obligara a limpiarlo y me despedí riendo, me sentí como una ganadora, aunque mi mamá casi me mato por romper las rosas de Susannah.
—Sí, me hizo limpiarlo porque sabía de sobra que yo te había molestado. Ella se entretenía con nuestras pequeñas guerras.
—Éramos muy bobos—me reí.
—¿Recuerdas ese verano en la feria? Cuando belly vomito y todo eso, y como tú odias a la gente haciendo arcadas porque te dan ganas de vomitar a ti, yo lo hice y terminaste vomitando junto a Belly.
—¡Aún lo recuerdo!—le pegue en el brazo pero sin hacerle daño—. Después no podía parar de vomitar y me puse a llorar.
—En ese momento me sentí victorioso, aunque después si me sentí mal y te lleve ese té de manzanilla, ¿lo recuerdas? Me quede contigo toda la tarde.
—Claro, estaba llena de puntos rojos en mi cara por vomitar tanto, te quedaste conmigo hasta que me lo tomara todo.
—Y después me la devolviste poniendo crema de batir en mi cabello cuando dormía.
Solté una carcajada.
—¡Lo había olvidado! Creo que hay una foto de tu cabeza blanca por ahí, la buscare.
—¿Ahora si crees en eso que nos decían?—preguntó.
—¿Que nos decían?—mi confusión era notoria.
—El típico, los que pelean se aman.
—Oh bueno, es cierto.
—Lo es, mi reina de las travesuras.
—¿Reina de las travesuras?—me reí—. ¿entonces tú eres mi rey de las travesuras?
—Lo soy—respondió.—Y lo seré siempre.
—Me agrada eso, prometido.
—A mi también, prometida.
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el verano en que amé. (Conrad Fisher y tú)
FanfictionCousins, el lugar que había visitado cada verano desde que tengo memoria junto a la familia Conklin, la familia Fisher y mi familia. cada verano era increíble y planeaba hacer de este el mejor de todos antes de irme a la universidad, ¿podría disfrut...