A prueba de fuego.

CAPÍTULO CATORCE

Caminamos, bueno más bien corremos en busca del pueblo. Yo ya no veo la hora de llegar, mis pies me matan al igual que mis piernas. Odio no poder volar, la capa pesa como un hipopótamo a punto de tener gemelos hipopotamitos.

Cuando por fin divisamos el pueblo nos detenemos completamente estupefactos, las casas están, algunas, aun prendidas en fuego, y otras ya no se pueden mantener de pie, en otras palabras están a punto de derrumbarse. Los charcos de sangre ya seca dificultan el avanzar sin de ensuciarse las botas. Todos los locales, tiendas, puestos están patas arriba y ni una sola alma se oye en todo el lugar, la quietud es fúnebre, tanto que ni los pájaros perdidos se atreven a silbar en busca de su parvada.

Zeth y Bastiaan están pálidos, no quiero saber cómo estoy yo. Rodeamos una fuente, claro si se le puede aún llamar fuente a un trozo de roca de la cual salen chorritos de agua sucia, llegamos al final del pueblo, es muy pequeño. Al llegar al borde hay un ligero barranco en el cual se extiende una pradera de rojos pastos, frente a nosotros se desarrolla la escena más grotesca y espantosa que he visto en mi vida.

Hombres, mujeres, niños, bebés, destrozados, con posiciones extrañas en la cual se pueden observar incluso hasta los huesos fuera de la carne desgarrada y blanca, donde se supone va el brazo hay una pierna doblada en cuatro partes, les faltan partes del cuerpo, muchos ojos miran hacia la nada, pero algunos parecen tener vida propia y observarnos desde debajo con aun la expresión mas impotente de terror que al morir dejaron sus rostros marcados para la eternidad. No puedo soportar el olor a podredumbre que sube en nubes de vapor verdes si no es que negras, el color rojo inunda cada parte del lugar, es una vista trágica, los cuerpos están amontonados, son demasiados, al menos unos cincuenta personas de los cuales aproximadamente veinte eran niños y bebes.

-Busquemos sobrevivientes- dice Zeth

-Zeth, no creo que haya nadie vivo- le contradice Bastiaan con los ojos ligeramente rojos a causa de las lágrimas que pugnan por salir. Me quito la capa dejando mis alas libres.

-Voy a sobrevolar la pradera para ver si queda alguien vivo, ustedes revisen el pueblo- digo

Bastiaan da media vuelta y camina en dirección a las casas destrozadas.

-Ten cuidado, no sabemos si aún hay neflims aquí- dice Zeth

-¿No se supone que yo debería decir eso?-

-Tal vez a la próxima te me adelantes alitas- me guiña un ojo y sigue los pasos de Bastiaan. Podemos estar en medio de un pueblo fantasma pero él nunca dejara de ser un idiota coqueto de bonitos ojos. ¿Qué? ¿Voy a empezar a pensar babosadas de nuevo? Remonto el vuelo sobre los cadáveres, solo pido no vomitar. Me esfuerzo lo más que puedo, incluso hago viscos con tal de revisar bien, desciendo un par de veces al creer ver movimiento y tomo el pulso pero nada, no hay suerte, todos están muertos, ya completamente segura de que no queda nadie vivo doy media vuelta, un sonido surge de la nada.

Vuelo con todas mis ganas, agudizo mis oídos intentando encontrar el lugar de origen. Estoy cerca, lo sé, entonces lo vi, una joven no mucho mayor que yo, tiene en sus brazos un bebe el cual está llorando. Es la cosa más tierna que he visto, vaya contraste de fondos, sus ojitos son de un dorado impactante y sus cabellos cafés los remarcan. No espero ni un momento más, lo levanto y lo meso para que no llore más, lo cual funciona. Con mucho cuidado alzo vuelo hasta llegar al pueblo en ruinas. Zeth y Bastiaan están limpiando libros que pudieron salvar de una casa en llamas. Aterrizo frente a ellos, primero me ven a mí y después al bebe que llevo en brazos.

-Por el cielo Kalia, no me digas que es tuyo, que el embarazo ni se te notó- ese, como siempre, es el idiota de Zeth

-Ja,ja ja, me parto de risa Zeth- mi cara es claramente lo contrario, por no decir mi voz, Bastiaan se acerca.

-Ve al pozo de ahí-señala al pozo que increíblemente aún se mantiene en pie- dale agua, hay cuerpos dentro de las casas, Zeth y yo seguiremos buscando

-De acuerdo- Solo espero que haya más sobrevivientes.

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Perdón por no subir, estoy en época de exámenes y pues no tengo mucho tiempo, pero les prometo subir otro capítulo en un ratito.

Están sin editar.

Con cariño Dany