Capítulo 28: La llamada.

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_Ryan: ¿Por qué los tenías ahí? -dijo colocándoselo-

_Yo: Te conozco lo suficiente para saber que ibas a venir y calentarme como una estufa -dije quitándome la ropa-

_Ryan: Bien. No me gustaría que lo utilices con otros -dijo poniéndose entre mis piernas- aunque lo nuestro no sea oficial -dijo cerca de mi oido- esto me pertenece -dijo introduciendo dos dedos dentro de mi-

Gemí y su mano se posó en mi boca.

_Ryan: Silencio, Ricura. No quieras que nos escuchen. Las paredes son de papel.

Poco después sacó sus dedos de dentro de mí y me giró con brusquedad para ponerme en cuatro. Hizo presión con su miembro en mi apertura, bastante humeda por sus dedos, y se deslizó fácilmente hacia adentro.

_Yo: Maldita sea Ryan -dije tras aguantarme otro gemido-

Nuestro sexo era fuerte y rápido. Algo agresivo. Las nalgadas y los jalones de pelo siempre estaban presentes junto a los mordiscos por toda la piel. El sonido era inevitable, pero si reducido, callado por sus besos, mordidas y aruñones.

_Ryan: No aruñes tan fuerte. Se quedarán las marcas y se darán cuenta. En tu casa me da igual, pero aquí eres la única mujer, Ricura. No querrás ponernos en evidencia.

_Yo: Si no se han dado cuenta ya, en poco tiempo lo harán -dije tras un pequeño gemido-

Poco después nos corrimos y se metió en la ducha en lo que yo secaba las sábanas con el secador.

_Ryan: Me gustaría dejarte así todas las noches, Ricura. Por cierto, lindo hematoma el de tu culo. Espero que no te duela y si lo hace que pienses en mí y como te nalgeaba mientras callabas mi nombre en la almohada.

_Yo: Jaja, gracioso -dije irónicamente- miraré si hay alguien fuera -dije vistiéndome-

Abrí y salí un momento de la habitación, miré si no había nadie y le hice una seña para que saliera.

_Ryan: Te amo, Ricura -dijo dándome un beso cuando salió-

Asentí y entré a mi habitación, poco después escuché su puerta cerrarse.

Me tumbé en la habitación y dormí. Me despertó unos golpes en la puerta.

_Yo: Si -dije abriendo media dormida-

_Ryan: La hora de la cena, Ricura.

_Yo: ¿Es obligatoria? -dije con sueño-

_Ryan: Debes comer algo. Vístete o entraré y lo haré yo por tí. Te dejo dos minutos. Lávate la cara.

Asentí y cerré la puerta. Me lavé la cara y me puse un traje. Salí y allí me esperaba Ryan hablando con Neal.

_Neal: Entonces ¿Vamos?

_Ryan: Estoy esperando a esta mujer. Se acaba de levantar -dijo en lo que abría la puerta-

_Yo: Ya estoy -dije dormida-

_Neal: Si parece que tú fuiste a jugar -rió-

A lo lejos ví a Jeremy salir de su habitación. Miró hacia nosotros y se fue.

Ryan y Neal fueron delante y yo detrás mirando el móvil.

_Yo: Vayan ustedes. Tengo que hacer una llamada antes.

Asintieron y entraron al restaurante. Salí al jardín del hotel y llamé allí. Me colgó tres veces y a la cuarta lo cogió.

_Jeremy: ¿Qué quieres? -dijo nada más cogerlo-

No escuché ruido, por lo que supongo que salió del restaurante.

_Yo: Hablar.

_Jeremy: ¿Sobre? -dijo cortante-

_Yo: Sobre todo. Me duele que me mires con asco y me hablas como si fuera una cualquiera -dije viéndolo por la cristalera del hotel-

_Jeremy: Eso eres. Una cualquiera. Te trato como eres.

_Yo: Jer...

_Jeremy: Jeremy -dijo cortándome-

_Yo: Bueno, imagino que no llegaremos a nada. Me seguirás odiando.

_Jeremy: Te odiaré toda mi vida. Y te trataré como eres -dijo al hacer contacto visual conmigo-

Acto seguido colgó y entró al comedor. Yo me quité las lágrimas que me habían salido tras sus palabras y me senté en un banco de espaldas a la cristalera.

_Moisés: Deberías entrar Ana. La hora de la cena terminará pronto -dijo detrás mía- ¿Estás bien? -dijo al verme-

_Yo: Sí. Solo son unos problemas. Ya entro -dije quitándome unas lágrimas-

_Moisés: Bien. Si necesitas ayuda siempre puedes confiar en mí.

Asentí y entré al comedor.

_Ryan: ¿Estuviste llorando? -dijo al verme-

_Yo: Calla. Ya hablaremos.

Comí rápidamente algo y subí a la habitación.

_Ryan: Ricura, abre -dijo tocando en mi puerta-

Abrí a desgana y me tiré a la cama antes de que entrara.

_Ryan: ¿Qué pasó? -dijo sentándose en mi cama tras cerrar-

_Yo: Nada. Sólo intenté hacer las paces con Jeremy.

_Ryan: ¿Qué te dijo?

_Yo: No importa. Ya no importa -dije llorando-

_Ryan: Dime qué coño te dijo -dijo enfadado-

_Yo: Ya te dije que no importa. No sigas.

Ryan salió y al rato tocaron la puerta de nuevo.

No abrí y siguieron tocando. Volví a abrir después de que insistieran.

Al ver a Ryan le dejé pasar y me tiré en la cama.

_Ryan: Por que dejaste que te hablara así -dijo entrando enfadado-

_Yo: Me odia y me considera una cualquiera -dije boca abajo-

_Ryan: No lo eres. Sólo le jode que no estés con él. No se lo diré a García, porque sé que no querrías que se lo dijera y le echen del equipo. En el fondo se que no te gustaría que pierda lo que verdaderamente le gusta.

Asentí.

_Ryan: ¿Quieres salir del hotel?

_Yo: ¿A dónde? -dije moviendo la cara a un lado-

_Ryan: No se. En Las Vegas de noche todo sitio es de fiesta.

_Yo: ¿Con quién?

_Ryan: Los chicos.

_Yo: No, gracias. Ve tú. Prefiero quedarme aquí.

_Ryan: Podemos ir solos si quieres.

_Yo: No. Sólo estaba pensándomelo. Disfruta.

_Ryan: No saldré. Prefiero estar aquí contigo.

_Yo: No tengo ganas de hacer nada. Sólo me quedaré aquí pensando.

_Ryan: Bueno, me quedo aquí sin hacer nada, pero contigo.

_Yo: No seas tonto. Sal a celebrar.

_Ryan: Ricura, para mí, tu eres más importante que celebrar una victoria. Si tengo que quedarme aquí hasta que dejes de llorar, aquí me quedo, pero mi hermano, no se merece tus lágrimas. Es un idiota que no ha madurado y que no tolera que no tenga todo lo que quiere. Sobretodo si siempre ha tenido a todas las chicas comiéndole la mano -dijo masajeándome la mano-

Los hermanos BlackwoodDonde viven las historias. Descúbrelo ahora