Segundos después empezó a hacer presión en mi culo. El solo se abrió camino y empezó a follarme con si no hubiera un mañana.
La entrepierna me dolía, pero me gustaba y por lo que notaba en mi trasero, este también iba a dolerme.
_Ryan: Te tiemblan las piernas, Ricura. ¿Podrás mantenerte de pie después? La verdad, no me importaría que vayas al centro comercial con dolor en tu cuerpo por la tremenda follada que te está metiendo tu novio.
Mi culo escocía y estaba rojo, podía apreciarlo por el pequeño espejo que tenía sobre la mesa, causado por las nalgadas que me estaba dando.
Salió de mi y me llevó a la ducha. Allí me puso un pie sobre la pared y estaba apoyada en el otro. Notaba la flacidez y el temblor del pie y su miembro entrando de nuevo en mi culo. Cuando se cansó de esa pose me bajó el pie y me agachó la espalda. No podía apoyar mis manos en el piso por lo que Ryan me cogía de las caderas para que no me cayera.
Finalmente salió de mí y se quitó el condón. Sabía lo que tocaba, me senté sobre mis talones y me tragué como podía su miembro.
Duró unos minutos y después hizo presión sobre mi cabeza para que no me fuera para atrás. Un brote de su esperma bajó directamente por mi garganta. Poco a poco fue saliendo más y al terminar sacó su miembro de mi boca. Le di una última lamida para recoger todos sus jugos. Me puso de pie, me hizo abrir las piernas y sus dedos se hicieron paso en mi vagina. Me corrí por segunda vez y continuó hasta la tercera.
Me dió una nalgada más y paró.
_Ryan: Podría continuar, pero tienes que ducharte. ¿Puedes mantenerte sobre ti misma? -dijo quitándome la atadura del cinturón con una mano, ya que la otra estaba sujetándome-
Me soltó y mis piernas flaquearon. Le escuché reír con malicia y cerrar la puerta después.
Me duché como pude y salí a duras penas del baño.
_Ryan: Por lo que veo te gustó. Aunque no sé si tenemos que ir a pedir una silla de ruedas para llevarte.
Se rió y yo intenté coger las prendas de ropa.
_Ryan: Esto me las quedo yo -dijo cogiéndome las bragas- y no, eso no vas a ponerte -dijo quitándome los pantalones-
Me tiró sobre la cama y me dió una falda que cogió de mi armario junto con un top que no podía llevar sujetador.
_Ryan: Por último te pondrás estas medias y estos zapatos -dijo tirándome unas medias de rejillas y unas botas de tacón alto- bueno y una cosa más, voy a ir por ella. No te vistas.
Salió y a los minutos volvió. Me puso de pie y me apoyó, esta vez sobre la cama.
_Ryan: Te acompañarán el vibrador y el plug de compras -dijo metiéndome ambos-
Me dió una nalgada y me ayudó a vestirme, ya que me costaba estar de pie sin que me flaquean las piernas.
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Los hermanos Blackwood
Teen FictionEn el esplendor de una mansión adinerada, la hija de una empleada encuentra un amor inesperado con el hijo pequeño de la familia. Juntos, desafían a las carreras clandestinas y comparten momentos íntimos. Sin embargo, las tensiones familiares los ob...