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VEGAS:

-¿Qué te trae aquí, futuro alfa? Kinn ya está en el trabajo. Deberías levantarte como él e ir con tu hermano a trabajar -Me miró con la ceja alzada. Sus ojos aceitunados estaban algo decaídos, algo cansados. ¿Qué?

No dije nada.

Solo caminé con el, cargándolo con delicadeza. Sorprendiéndolo.

-¿Qué haces?

-Quiero comodidad.

-Estoy bien cómodo. Gracias.

No dije nada, solo la llevé a su cama y lo senté suavemente. Ya se podía ver su vientre abultado modelar su ropa materna.
-Bien. Voy a imaginar que estás molesto. ¿Peleaste con Pete? Si eso es así, deberías...

-¿Qué mierda está pasando? pregunté rápidamente de pie enfrente de el-. Dime la verdad, Porsche. Seré el alfa de esta manada, y seré el tío de tu bebé. -

El calló.
Su expresión molesta se suavizó.
-Pete te lo dijo.

-Exacto. ¿Qué es? ¿Qué pasó? inquirí con la paciencia que tenía hacia el. Dime toda la verdad, precioso mío. -

-Ya dije que me dejaras de llamar así -dijo con los dientes apretados. Me miró algo molesto-. Pete puede mal entenderlo.

Resoplé.

-Eso no importa ahora.

-Eres un cabeza hueca e idiota. A veces también un insensible declaró secamente. Y también un dramático.

-Te molestaré como el pasado, si no me lo dices. -Comencé a acercarme peligrosamente. El se tensó y puso una mano en mi pecho-. Sigues oliendo delicioso, precioso mío.

-¡Alguien me mandó una carta de amenaza! -soltó rápidamente. Su declaración abierta, hizo que todo mi cuerpo se congelara-. Te lo iba a decir, pero luego. No esperé que Pete...

-¿Dónde está la carta? -pregunté con la ira circulando todo mi cuerpo -¡¿Dónde está la maldita carta?!

Mi grito hizo eco por todo su cuarto.

-Debes calmarte

-¿Calmarme? ¿Cómo voy a calmarle luego de saber que ese maldito te mandó una carta de amenaza? ¡¿Cómo?!
Sí. Tenía que matarlo con mis propias manos. Así me sentiría a gusto al ver su ensangrentado cuerpo en el suelo.

-Serás el líder de una manada. Debes pensar con la cabeza fría argumentó, tratando tranquilizarme. Sin embargo, mi ira no me dejaba pensar con racionalidad. Solo quería destrozarlo por tocar algo apreciado para mí.

-La carta.

El suspiró derrotado y señaló el ropero.

-Primer cajón.

No esperé más y fui donde había indicado. Lo abrí y saqué el pequeño sobre. Lo leí dentro de mi cabeza, y prácticamente estaba diciendo que algo le pasaría si no me convence de darles a los integrantes de la manada Arcanos.

Amenazarlo a el.

Amenazar a un integrante de mi manada. A alguien importante para mí.
Lo pagaría bien caro. No le dejaría tocar a ningún integrante de mi manada, a nadie!

-Vegas...

-No te pasará nada, Porsche- dije, mirándolo fijamente. Me acerqué a el y le besé suavemente la frente-. Sobre mi cadáver.

Me alejé dejandolo sorprendido.

No esperé más y encaminé hacia la puerta, donde encontré a Pete, mirándome algo adolorido. Ahora no era tiempo para explicarle mis sentimientos.

ERES MI ALPHA (vegaspete)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora