capítulo 25

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Con su dedo se colocaba las gafas hacia atrás con algo de impaciencia, la mujer que tenía delante era la culpable de estar contra las cuerdas, siempre se había caracterizado por estar tranquilo gracias a que tenía en la recámara un plan B, pero en esa ocasión no podía tener la tranquilidad mental que en otras situaciones anteriores.

-estoy esperando a que me digas a quien le has estado pasando nuestra ubicación-

Laura se quedó en silencio y no dijo nada aunque ella sabía que tenía las de perder.

-escucha, tienes a tu hermano sangrando a chorros, si no te abandono aquí con él es porque Alicia me ha dicho que tu hermano tiene un niño pequeño pero ...¿Sabes que es esto?- le dijo Sergio mostrándole un USB

Ella negó con la cabeza

- ésto es mi carta maestra en contra tuya, tú sabes que yo tengo contactos, no hay nada que un buen rollo de billetes no pueda comprar. Dentro de este pendrive tengo información que a cierta persona le interesa.

-¿me vas a entregar a la policía por un par de estafas? Yo saldría pronto de la cárcel en cambio tú ni volviendo a nacer cumplirías con los años de tu sentencia.- explicó ella con una amplia sonrisa.

-Me parece que os llevaríais una sentencia mayor, ya que habéis secuestrado a un menor, bueno, en realidad a dos menores. La información se la daría a una tal Rebecca Montez, ¿Te suena de algo?- preguntó el profesor con una mirada intimidante.

La sonrisa rápidamente se borró del rostro de Laura, y sintiendo que tenía que proteger a su pequeño sobrino, no tardó en darle la información del hombre que los perseguía.

-esa mujer es horrible- dijo ella

-tengo entendido que es la exmujer de tu hermano, la madre del niño, tú hermano huyó con su hijo sin que su madre lo supiese, es un delito grave aparte de los ya cometidos- explicó Sergio.

-no le puedes decir a esa mujer donde estamos- contestó Laura.

-haz lo que te pido y no lo haré- sentenció el profesor.

- la ubicación se la dí a un hombre, era guardia civil pero fue retirado de su cargo por corrupción- contestó la morena.

-nombre- ordenó él profesor

-Lorenzo Monterrubio - dijo Laura.

-más te vale no traerme más problemas, porque de lo contrario, yo mismo llevaré a tu sobrino donde su madre y ya no lo veréis jamás- amenazó el profesor a lo cual Laura contestó con un leve temblor.

-¿Lo has entendido?

-Sí- contestó ella llevando su mirada hacia el suelo.

Sergio sacó su teléfono y marcando uno de los pocos números que tenía en la agenda dijo:

-lo tengo, llama al médico- ordenó él.

-está bien- contestó Alicia al otro lado del teléfono.

-tienes suerte, vas a vivir- le dijo ella mientras llamaba al médico el cual ya había trabajado con Sergio en sus anteriores atracos.

Ambos esperaban al doctor en silencio entre algún que otro gemido de dolor por parte de Raúl.  Alicia se colocó enfrente de él y mirándolo fijamente a los ojos no pudo evitar echarle en cara lo que había pasado.

-tu hermana y tú sois unos hijos de puta ¿Queríais entregarnos a la policía aparte de quitarme a mí hija? - explicó Alicia con rabia.

-yo no sabía nada del transmisor que llevaba mi hermana-dijo él entre quejidos taponando con la mano la herida de bala.

Un atraco al deseo (Sergio Marquina Y Alicia Sierra)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora