Haerin sintió el viaje hacia Gangnam demasiado corto. Y es que para estar más de media hora sentada en un bus con su madre al lado, era extraño que todo se sintiera tan corto. Además que el transporte hacía algunas paradas de vez en cuando.
Tuvieron que tomar un taxi para la clínica y cuando estuvieron ahí, Haerin empezó a sentir sus manos sudorosas. Su corazón latía con fuerza y el desayuno que tomó se esfumó; ahora su estómago tenía un vacío como si no hubiera comido en semanas. Definitivamente no estaba lista para eso, ni siquiera con la semana completa de anticipación que tuvo para "prepararse".
Haerin nunca fue oficialmente a un psicólogo, mucho menos a un psiquiatra, lo que significaba que era algo totalmente nuevo para ella y que tenía demasiado peso en su vida. Y habían veces en las que Hae prefería evitar cosas nuevas porque no sabía cómo iba a reaccionar y se anteponía muchísimo a cosas que no estaba segura si sucederían o no.
Las dos estaban sentadas en la sala de espera, donde Haerin pudo ver a más adultos y jóvenes que seguramente estaban en la misma condición que ella. Lo que la asustó, fue ver que era la única de su edad que se encontraba en la sala y eso no le entregaba mayor seguridad. Su preocupación aumentó más y su madre lo notó en cómo movía su pierna constantemente y miraba hacia todos lados, como si estuviera buscando la salida.
—¿Estás muy nerviosa? —le preguntó.
Haerin la miró y asintió, recibiendo una sonrisa de Haewon.
—Es difícil esto, pero es por ti, Haerinie. Créeme que no será terrible, hija —suavemente dejó caricias en su mano.
Quiso creer en eso, pero la ansiedad estaba ahí y cada vez era peor. Su pecho se sentía asfixiado y su estómago dolía, pero de solo nervios. A Haerin no le gustaba mucho hablar de sus cosas, aunque lo hizo finalmente con la señorita Ban, pero ni siquiera de manera tan específica como esperaría. Había muchas cosas más que Haerin no podía soltar y eso le provocaba más preocupación.
A los diez minutos, Haerin fue llamada por el altavoz de la sala. Era la voz de un hombre, así que eso aumentó su inquietud.
Como era menor de edad, obligatoriamente debía entrar con su mamá. Fueron por un pasillo un poco estrecho y llegaron a la consulta 5.
Haewon entró primero y Haerin la siguió por atrás. Saludaron al psiquiatra con la mejor expresión posible y se sentaron enfrente de él.
—Buenos días —saludó.
Hae mantenía su cabeza agachada.
—Mi nombre es Park Dakho. Supongo que saben que Heesoo me dijo que derivaría a una de las chicas con las que trabaja —Haerin tragó en seco. —Esto no es algo malo para que estén tranquilas. Mejoramos muchas cosas aquí, Haerin.
La mencionada alzó un poco más su vista con su nombre y pudo ver el rostro de serenidad que tenía el hombre enfrente suyo. No tenía más de cuarenta y cinco años, pero seguía siendo extraño.
—Un gusto, señor Park —dijo Haewon —. La verdad es que sí sabíamos que la señorita Ban derivó a Haerin a su consulta y es algo muy importante todo este proceso.
El psiquiatra le dio la razón con un asentimiento de cabeza, pero Haerin parecía estar en otro lado o demasiado nerviosa para reaccionar. Las palabras de su madre eran incomprensibles y no sabía de qué estaban hablando, solo escuchaba palabras y palabras sin poder darles un sentido.
Y de repente, Haerin quedó sola en la consulta con el señor Dakho. Fue ahí donde su mente despertó y se dio cuenta de lo qué pasaba.
—¿Alguna vez has oído hablar sobre la ansiedad?
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típicamente popular | daerin
Fanfiction"Es solo una pianista tímida e introvertida cruzando su vida con la chica más popular, ¿qué podría pasar? O donde Haerin termina en un tipo de triángulo amoroso con Danielle y Sunghoon, la pareja más popular de la escuela". Luego de que el grupo irr...