Capítulo 36: "Itachi Uchiha"

188 29 1
                                    

Izumi los había echado del apartamento temprano en la mañana, dos días después del funeral del Hokage

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Izumi los había echado del apartamento temprano en la mañana, dos días después del funeral del Hokage. Sasuke no se quejó, aunque Naruto exigió que su equipo estuviera en la reunión. Juró que era una reunión sobre Kakashi, y Sasuke tuvo que admitirlo, estuvo de acuerdo. Guy, Izumi, Pakkun y algún tipo cualquiera con una máscara ANBU ya se habían reunido en su apartamento.

Izumi dijo que les prepararía el desayuno a él y a Naruto si se demoraban, así que decidieron optar por la opción segura e ir a entrenar. Pero luego Naruto se ofreció a llevarles el desayuno, alardeando de sus boletos especiales de ramen gratis.

Sasuke realmente no quería ramen para el desayuno, pero tal vez un plato no estaría de más. El único problema fue que Naruto perdió sus boletos.

—¡Oh no! No me digas que le di a Konohamaru mi último boleto —se quejó Naruto, buscando frenéticamente en sus bolsillos.

—Típico —se burló Sasuke—. Te ofreces a invitarme a desayunar y aun así tengo que pagarlo.

—¡No no no! —Naruto lloró—. Voy a arreglar esto. ¡Lo juro!

Terminó desnudándose hasta quedarse en calzoncillos y sacudiéndose la ropa. Sasuke puso los ojos en blanco.

—Bueno, si no pagas, elegiré otro lugar para desayunar —dijo Sasuke—. Quiero té, y como aquí no lo sirven, tendré que buscarlo en otra parte.

—¡No! ¡Espera, no te vayas! —Naruto sacudió la cabeza frenéticamente.

—Honestamente, Naruto, siempre debes estar preparado cuando le des comida a un lindo Omega. —Teuchi resopló—. Especialmente tu pareja. Esta vez corre por cuenta de la casa, pero ten más cuidado. —Miró a Naruto cuando dijo eso, pero le sonrió cálidamente a Sasuke.

—Gracias. —Sasuke inclinó la cabeza.

—¡Muchas gracias Teuchi! —Naruto sonrió y volvió a ponerse la ropa.

Teuchi negó con la cabeza.

—Tienes suerte de ser mi mejor cliente.

—¡Necesitamos comer mucho y mantener nuestras fuerzas para cuando regresemos, Kakashi sensei! —Naruto sonrió—. Así que come, Sasuke. Necesitas recuperar tu apetito después de tu estancia en el hospital después de lo que sea que te haya hecho esa espeluznante dama serpiente.

—Claro, lo que sea —suspiró Sasuke. Se detuvo ante el suave tintineo de las campanas, pero cuando miró por encima del hombro no había nadie alrededor.

Naruto se movió, distrayéndolo.

—¿Que hizo...

—¿Qué? —Sasuke frunció el ceño.

GravityDonde viven las historias. Descúbrelo ahora