En la escuela "La Rosa Alta" vivía un fantasma, él cual se sentía muy vacío debido a su soledad.
Hasta que de pronto un día, el mismo Dios que le habia hecho tan infeliz y que le provocó tanto dolor le envió un lindo Ángel
No literalmente
Era un chi...
Ya era medio día y Rolian seguía dormido, estaba exhausto, la semana había sido la más dura que había tenido hasta ahora, no era poco.
Encontrar un fantasma, una realidad que toda su vida había creído falsa, un ser que explica que hay después de la muerte. Había hablado con algo así.
Convivir con gente que pensó que ni siquiera lo mirarían por vergüenza de sí mismos.
Estar una semana más cerca de un aniversario...
No era fácil. Era exhausto.
Mientras pensaba, medio dormido, escucho como el portón de afuera se abría, se despertó de golpe, con los ojos como platos salió corriendo para ver por la ventana del cuarto, lo que miró era bastante obvio. Richard estaba cerrando el portón parecía algo serio y la costumbre de una cara sonriente en el hizo rara la expresión sería de su rostro. Rolian sonrió descaradamente y pensó que ahora el burlón debería ser él.
Justo cuando volteó para irse, su leve sombra se reflejo en los ojos como hojas de alguien, como estás volaron a su dirección y cayeron en otro lugar.
Richard se sorprendió momentáneamente pero luego sonrió, resoplando.
Al entrar a la casa, miró a Rolian apenas llegando al último escalón, ambos hicieron contacto visual, Rolian iba a decir algo cuando Richard lo miró de arriba a abajo, Rolian se inquieto.
Richard lo miró serio y con una voz tranquila dijo —¿Te depilas?—
"..."
La sonrisa en Rolian se congeló, estaba aseguro que tendría que buscar como esconder un cuerpo si este idiota seguía así.
—Buenos días— Contestó Rolian algo irritado.
Había olvidado que por que estaba tan tranquilo ayer al llegar a casa por la clara falta de este hombre se había puesto un conjunto de pijama que era un short y una camisa se botones con manga larga, y sí, se depilaba, aunque su vello era escaso no le gustaba tener unas piernas así pero era un gusto personal, sabía que era algo muy femenino por eso evitaba ocupar cosas cortas con gente que podría usar esto como una burla.
Que estúpido ahora tendría que soportar burlas de otra persona.
—Buenos días, parece que no dormiste bien, ¿Acaso te desperté?— Richard se estaba quitando el abrigo y camino al segundo piso mientras que Rolian se sentó en el sillón con su celular.
—No, solo no tengo mucho sueño—
Rolian sintió que seria un largo fin de semana.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—¿Entonces que paso?— Preguntó Noel angustiado y mirando por la ventana.
Rolian estaba serio y no tenia intenciones de ocultar algo —Mi padre dijo que era una locura que rentara este lugar así que por el momento creo que seguiré viniendo a escondidas, supongo que piensan que me meto por la ventana, y por eso la gente que dijiste que vino el domingo estaba revisando afuera.—
