CAPÍTULO 24

7.6K 571 257
                                    


ROXANNE


Veo a Ivanna bajar con su equipaje y aún no me creo que quiera ir a la boda con nosotras, Alice no tiene problemas, de echo ellas quieren conocerla, les he hablado mucho de Ivanna y del proyecto que está llevando acabo, Alice se ofreció a ayudarla si necesita ayuda legal, pero Ivanna dijo que no había problemas con eso, que se había informado bien antes de hacer cualquier movimiento.

—¿Estas segura? —le pregunto —irá mucha gente, estarás rodeada de personas que no conoces.

—Está bien, ya he superado un poco ese tema, he empezado a relacionarme con más personas en los últimos meses —dice pasándole su equipaje a Ivan.

—Si no te sientes bien, solo tienes que decirlo o te retiras del evento —le digo y asiente.

—¿Donde está Katerina? —pregunta buscando a su hermana.

—Fue por un regalo —le digo —nos alcanzará en el aeropuerto.

—De acuerdo, vámonos entonces.

Al llegar al aeropuerto Katerina ya está esperándonos luego de comprar el regalo que quiere darles a las futuras esposas, al llegar a Nueva York Kate se encarga de conducir hasta las afueras de la ciudad donde será la boda, me gusta verla conducir y más si se pone sus gafas, se ve tan sexy.

—¿Estas enamorada Volkova? —me pregunta y sonrío colocando mi mano en su pierna.

—Como no tienes idea, pero ahora estaba pensando en otra cosa —ella se gira para verme y sonríe volviendo su vista a la carretera.

—¿Que estás pensando? —dice sujetando mi mano.

—En lo ardiente que te ves mientras conduces —ella se ríe y escúchalos el carraspeo de Ivanna.

—¿Sabes lo incómodo que es ver a tu hermana actuar así? —me pregunta acercándose para que nos separemos.

—Oh si, claro que tengo idea —le digo y sonríe.

—¿Y porque ahora tengo que pagarlo yo?

—Llegará tu momento Nana —le dice Kate. —hasta entonces tendrás que soportarnos.

Llegamos a los predios del castillo y la seguridad nos deja pasar en cuanto nos ven, Kate avanza por el camino hasta que vemos el castillo a lo lejos.

—Es tan dramática ¿No podía casarse en el jardín de su casa y ya?

—Vaya que son muy diferentes ustedes dos —comenta Ivanna.

—Prepárate para la batalla que se avecina —le dice Katerina.

Estacionamos afuera y varios hombres se acercan para abrirnos las puertas y bajar el equipaje, pensaron cada detalle, Ivanna no deja de ver a sus alrededores mientras entramos al lugar y veo a mi madre salir apresurada de la cocina.

—Maldito chef ¿quien se cree? No sigue ninguna de mis órdenes —Dice peleando sola —¡Te dejaré una mala referencia! —grita en dirección a la cocina.

—Y esa es mi modesta y elegante madre —le digo a Ivanna y mi madre sonríe nerviosa al ver que tenía público.

—Lo siento, no soy así, pero ese hombre me está fastidiando y antes de que digas algo —me dice —no vas a hacerle nada.

—Como quieras, madre ella es Ivanna, la hermana de Katerina —se la presento y mi madre le da un abrazo.

—Es un placer conocerte, mi ángel me ha a hablado mucho de ti —Ivanna voltea a verme conteniendo la risa y la veo entrecerrando mis ojos.

HémeraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora