Hémera

CAPÍTULO FINAL

ROXANNE

Bajo de la camioneta con mi bebé en brazos, le coloco bien su abrigo y la manta por el viento frío que sopla. Ella me sonríe y me pierdo por completo es sus ojos grises, es la segunda mujer que me hace enloquecer con su mirada y su cabello rubio. Tomo el ramo de flores y avanzo por el lugar respirando profundo ¿porque en este lugar tan frío tienen que haber personas cálidas? esto es  algo que quiero hacer y no había podido hacerlo hasta ahora. Me detengo frente a su lápida y pasó mis dedos por su nombre al dejar las flores en su lugar.

—Mira a quien he traído —digo con una media sonrisa. —¿No te parece hermosa? Aunque debería asombrarte, solo tienes que verme, heredo toda mi belleza.

Mi bebé sonríe al escucharme hablar y no puedo parar evitar darle besos en sus mejillas, al verla sé que es lo mejor que me ha pasado en la vida.

—A ti también te volvería loca si la conocieras —sonrío con tristeza —tiene un poder único para envolver a la gente con su mirada, me recuerda un poco a ti, lo hacías sin que te dieras cuenta.

Volteo hacia la carretera y veo un auto negro estacionarse frente al mío, veo a la mujer que baja del auto y vuelvo a girarme en dirección a la lápida.

—¿Recuerdas cuando te dije que quería una ciudad? —hasta yo sonrío al recordar ese momento —tu me dijiste que estaba loca, que era imposible, pero ¿que crees? Mi esposa estaba más loca que yo cuando me la regaló ¿puedes creer que alguien te de una ciudad solo porque tienes un capricho?

—Debe amarte mucho como para hacer ese tipo de locuras —dicen a mi espalda.

—Y no tienes idea cuanto la amo yo —sonrío y me giro estirando mi mano para tomar la suya —esta diosa de mujer es mi esposa, seguro te quedarías embobada al verla —sonrío —me conseguí a la mas sexy de toda Rusia.

—¿En serio eso es lo que querías decirle a Harper? —pregunta Katerina riendo.

—Quería presentarle a mi familia cielo y por supuesto que siempre tengo halagar a mi esposa.

—Ven aquí mi solecito —dice envolviéndonos en sus brazos a las dos.

—Esta es mi familia Harper, Katerina Kozlova, mi esposa y nuestro rayito de sol —sonrío —Daila Volkova Kozlova.

Hace unos meses le dije a Kate que quería venir a dejarle flores a Harper y presentarle a mi familia, ella lo acepto sin pensarlo. Kate sabe que Harper siempre será alguien importante para mí aunque ya no esté, Harper no solo fue mi primer amor, fue mi mejor amiga, la persona que me hacía brillar en mi adolescencia y aunque pensaba que esa luz se había apagado, Katerina me demostró que yo siempre he brillado y que nadie se puede llevar mi luz, ni siquiera lo que pasamos hace nueve meses.

✨

9 meses atrás

Mi cabeza aún duele, mis ojos se sienten mas pesados que nunca, pero siento la necesidad de abrir mis ojos. Veo una una tenue luz que alumbra la habitación en la que me encuentro, mi cuerpo duele y lo primero que hago es llevar mis manos a mi vientre.

—¿Puedes moverte para mami? —le hablo a mi bebé. —quiero estar segura de que no te hice daño.

Como sintiera mi preocupación comienza a moverse poco. Capto a mi alrededor un sonido constante de una máquina y me siento en el sofá para ver mejor. A mitad de la habitación veo a la mujer más hermosa que mis ojos han visto. Mi corazón comienza a latir con fuerza, como si quisiera salir de mi pecho e ir con su dueña. Me quedo ahí sentada en el sofá solo observando hacia la camilla ¿es un sueño? Seguro aún sigo dormida.