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Bo soltó un gran suspiro una vez y el Guantelete entró al hiperespacio, no había dudado ni un segundo en abandonar Plazir-15 junto a Din, Zaya y Grogu luego de aquella conversación con los que en algún momento fueron sus compañeros de equipo.

No iba a mentir que le había dolido pero, Bo se sentía libre ¿Por qué tenía que ganarse el respeto del grupo de imbéciles que la había abandonado en primer lugar? El sable oscuro ahora estaba bajo su poder, era algo que siempre quiso pero cuando entendió que el poder tras el significaba dejar a Din, a Zaya… a Grogu, prefirió no tomarlo.

En ese momento, cuando Din soltó su mano y salió, Bo lo entendió. Había pasado toda su vida tratando de demostrarle a los demás que ella era digna de liderar, que ella recuperaría Mandalore pero… ¿En algún momento había pensado en ella?

¿En lo que realmente necesitaba? Jamás se había dado un descanso, y ahora… y ahora que finalmente sentía que pertenecía a algo, que no tenía o debía demostrarle a nadie su valor como persona ¿Lo perdería?

¿Por unos idiotas que al final solo les importaba más un sable que ella?

No.

No llenaría a Mandalore de imbéciles así.

Tardó bastante tiempo en darse cuenta, pero ahora no estaba sola.

—Tengo tanta hambre—La voz de Zaya la regresó levemente a la realidad—.

Bo soltó una risita bajo el casco, dejó que el piloto automático se hiciera cargo, y giró el asiento del piloto en dónde se hallaba sentada para mirarla.

Din estaba en el asiento secundario, Grogu en su regazo y Zaya estaba sentada en el suelo del Guantelete a un lado de R5.

—¿Quieres sopa pog?—Preguntó a la chica mientras se colocaba de pie—Creo que también tenemos algo de pan en lo poco que empaqué.

Zaya se colocó de pie de un salto—Por Manda que si, pan y sopa ¿Qué más se le puede pedir a la vida?

Bo se acercó a Din y se agachó ligeramente para mirar a Grogu—¿También tienes hambre?—Preguntó al niño.

Grogu estiró sus bracitos hacia la mujer de armadura azul y ella lo sostuvo, cargándolo—¡Paaa!—Expresó.

Bo se colocó de pie nuevamente—Vamos a preparar sopa pog, Grogu.

Zaya también estaba dispuesta a seguirla pero Din le hizo una seña para que se quedara.

—¿Pasa algo, Din?—Preguntó ella mientras se acercaba, no habían hablado mucho luego de lo ocurrido en Plazir. Zaya sintió algo de nervios ¿Tal vez quería hablar sobre lo que ella había dicho en medio de su miedo cuando creyó que Bo se iría?

Din se colocó de pie y Zaya evitó retroceder por los nervios—Te tomo como mi hija.

Zaya estaba segura qué su corazón se había detenido, sus labios temblaron bajo su casco, se preguntó así misma si había escuchado mal—¿Q-qué?—Tartamudeó.

—Te tomo como mi hija, Zaya—Repitió Din.

Zaya se sintió petrificar ¿Estaba escuchando bien? O tal vez, tal vez estaba dormida y estaba soñando todo eso.

—No es un sueño—Se burló Din al predecir sus pensamientos.

Zaya sintió sus ojos humedecerse—¿En serio, Din? ¿Enserio tu…. Quieres que sea tu hija?

—Mi hija y la de Bo—Le informó dándole un apretón en el hombro—Lo había estado pensando mucho antes de que me lo dijeras.

Zaya soltó un sollozo y de un brinco se aferró a Din—Juro que seré la mejor hija, Din, te lo juro.

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